
Durante un control vehicular en la Ruta Nacional 3, en el kilómetro 2.766, Gendarmería inspeccionó un camión con acoplado proveniente de Buenos Aires y detectó más de 13 kilos de cocaína escondidos en su interior.
El hallazgo se produjo gracias al can detector «Mauro», que reaccionó en la zona de la guantera del rodado. Al abrirla, los gendarmes encontraron tres paquetes sospechosos. Luego, una inspección más minuciosa reveló diez paquetes adicionales ocultos en distintos compartimentos.
Las pruebas de narcotest confirmaron que la sustancia encontrada era cocaína, con un peso total de 13 kilos 665 gramos.
El conductor del camión quedó detenido por orden de la Fiscalía Federal de Río Grande, que también dispuso el secuestro del vehículo y de otros elementos relevantes para la causa.
El procedimiento contó con la intervención del personal de ARCA debido a que se trataba de una zona primaria aduanera.