La decisión de suspender por dos meses la restricción introducida en las bonificaciones surgió de una negociación que tuvo el gobierno con sus aliados radicales a fines de abril. A quienes ya se les facturó mayo con la tarifa social restringida, se les otorgará un crédito en la próxima factura.
Según publica Econojournal, el directorio del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) aprobó el viernes una resolución en la que instruye a las distribuidoras de gas para que vuelvan a aplicar una bonificación de 100 por ciento en el precio del gas natural a los beneficiarios de la tarifa social durante los meses de mayo y junio. De este modo, quedan en suspenso por sesenta días los recortes en la bonificación que habían sido aprobados en la audiencia pública de noviembre del año pasado y aplicados a través de las resoluciones 300 a 311 del organismo regulador.
Con respecto a la facturación que ya ha sido emitida, en el artículo 2 de la norma se instruye a las distribuidoras de gas a efectuar los cálculos pertinentes a fin de determinar la diferencia que corresponda y proceder a asignar el crédito que surja por la bonificación de tales días en la próxima factura.
La decisión de suspender por dos meses la aplicación de las nuevas bonificaciones surgió de una negociación que tuvo el gobierno con sus aliados radicales dentro de la coalición Cambiemos, quienes a fines de abril les reclamaron atenuar el impacto provocado por la suba de tarifas. De la negociación que el gobernador de Mendoza y titular de la UCR Nacional, Alfredo Cornejo, mantuvo con el presidente Mauricio Macri y su ministro de Energía, Juan José Aranguren, surgió como propuesta de prorratear el pago de las tarifas de gas correspondientes a los dos bimestres de mayor consumo, algo que el gobierno ya venía preparando, y la decisión de suspender por dos meses los cambios que se introdujeron en la tarifa social.
El Ministerio de Energía dispuso el 23 de mayo a través de la resolución 218/18 la suspensión por dos meses de la aplicación de los criterios de bonificación introducidos a través de la resolución 474-E/17, pero faltaba que el Enargas instruyera a las distribuidoras pongan en práctica los cambios.
El esquema original
La historia de la tarifa social se remonta al 28 marzo de 2016. La resolución 28 firmada por el ministro de Energía, Juan José Aranguren, ese día elevó los precios del gas en boca de pozo, aumento que luego fue anulado parcialmente por la Corte Suprema, y estableció además que los usuarios residenciales más vulnerables iban a tener una bonificación de 100% del precio del gas natural que consumiesen, debiendo abonar los costos de transporte y distribución incluidos en la factura.
La lista de beneficiarios incluye a jubilados, trabajadores en relación de dependencia y monotributistas que percibieran una remuneración bruta menor o igual a dos salarios mínimos, inscriptos en el monotributo social, empleadas del servicio doméstico, personas que cobran seguro de desempleo, beneficiarios de programas sociales, discapacitados y titulares de pensión vitalicia por ser veteranos de guerra.
La restricción del beneficio
Ese esquema siguió vigente hasta que en noviembre del año pasado el Ministerio de Energía restringió el descuento a través de la resolución 474-E/17. En su artículo 4, la norma dice que la bonificación va a ser de 100%, pero solo sobre un bloque de consumo base determinado en el anexo II de esa resolución y de 75% sobre un segundo bloque “cuyo volumen será igual al de dicho bloque de consumo base”. Por último dice que “los consumos por encima del bloque identificado en el apartado b (los que están alcanzados por el descuento del 75%) se abonarán al 100% del precio del gas natural o del gas propano indiluido”.
Al revisar el anexo II se puede observar que el bloque de consumo base beneficiado por una bonificación del 100% del precio del gas varía, según la compañía y según el mes. Por ejemplo, un cliente de Metrogas que antes tenía bonificado todo el precio del gas que consumiese en enero solo tiene una bonificación del 100% sobre los primeros 16 m3 que consume.
En febrero se mantiene en 16 m3 y luego el bloque de consumo base se empieza a ampliar hasta que en junio cubre 77 m3. Esto significa que en junio un usuario residencial de esta compañía que opera en la Ciudad de Buenos Aires y el sur del conurbano debería tener una bonificación del 100% sobre los primeros 77 m3 que consume, del 75% sobre los 77 m3 siguientes y a partir de los 154 m3 de consumo mensual empieza a pagar el valor del precio del gas como cualquier otro cliente.
Con el cambio que instrumentó Enargas, en mayo y junio la bonificación seguirá siendo del 100 por ciento, pero en julio, en pleno invierno, volverá el esquema aprobado en noviembre.