En Neuquén hay una planta instalada cerca de Añelo y otras cuatro en proceso de habilitación. Río Negro aprobó dos proyectos, uno de ellos comenzó a operar en el 2018.
El volumen de residuos que genera la industria hidrocarburífera, especialmente por los insumos que se utilizan en las fracturas en el no convencional, originó un nuevo eslabón en el sector: las plantas de residuos especiales. Entre Neuquén y Río Negro hay dos empresas operando pero otras cinco en proceso de conseguir las respectivas habilitaciones para poder tratar los desechos.
Según informó Diario Río Negro, en Neuquén hay una en operación, se trata la empresa Servicios Ambientales del Neuquén (SAN), que es la única habilitada para relleno de seguridad, es decir la disposición final de los desperdicios que genera la industria.
Pero además hay otras cuatro firmas que están en proceso de habilitación. Según la legislación provincial el protocolo tiene dos instancias, una administrativa y otra de ejecución de obra. Treater y Ecopolo ya tienen el primer decreto firmado por el gobernador, es decir que cumplieron con todos los requisitos burocráticos y ahora deben realizar la obra. Una vez fiscalizada se firma el segundo decreto que es la habilitación final para comenzar a operar.
En ese sentido, fuentes de la subsecretaría de Ambiente de Neuquén aseguraron que Treater “está muy avanzada” en la obra.
Distinto es el caso de Ecopolo que obtuvo el permiso en julio de 2017 pero aún no terminó con los trabajos necesarios para solicitar la habilitación. La construcción de la infraestructura va más lenta pero está en proceso. Se estima que el año que viene estará operando. Todas las plantas estarán ubicada en la zona conocida como “Bajada del Mono”, cerca de Añelo.
Además hay otras dos empresas que están tramitando el primer proceso, se trata de Indarsa y Soluciones Ambientales Patagonia (SAP) que ya entró en operaciones en Río Negro. SAP es la única firma que trabaja con los residuos en Río Negro. (Ver aparte). Actualmente el proyecto está en la Secretaría de Planificación y Acción para el Desarrollo (Copade).
El proceso administrativo, que se rige por el decreto provincial N° 2.263, debe pasar también por las áreas de Industria, Hidrocarburos y Recursos Hídricos. De esta manera Neuquén tendrá cinco plantas de residuos peligrosos. En Río Negro además de SAP, Treater tiene la habilitación para operar pero no avanzó con las obras para habilitar el predio. Fuentes de la secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de Río Negro indicaron que los residuos que SAP no está habilitada a tratar, como sólidos condicionados, son enviados a otras provincias, especialmente a Neuquén.
Desde la firma informaron que al momento de tramitar la renovación de la matrícula como tratador se solicitó a la provincia la incorporación de otras corrientes de tratamiento, para ser mucho más abarcativos, aunque el trámite está aún a la espera de una resolución. En tanto que se aseguró que “con las tecnologías que hoy dispone SAP cubre, no solo los residuos sólidos condicionados, sino también un amplio espectro de los residuos contemplados en la Ley 3250 y que se generan en la provincia de Río Negro”.
Desde la Subsecretaría de Ambiente neuquina aseguraron que si bien la habilitación de las nuevas empresas es necesaria e importante “está cubierta” la demanda que generar las operadoras. “Se está haciendo un trabajo importante con las operadoras para generan la menor cantidad de residuos, pero es importante que se habiliten otras plantas”, señalaron.
El proceso más largo es el administrativo que requiere, entre otros requisitos, el informe del impacto ambiental y la audiencia pública.
“Promovemos que vengan inversiones porque la demanda no va a parar. Obviamente que trabajamos en reducir la generación de residuos por parte de las empresas”, agregaron.