Los vecinos del barrio Azcuénaga fueron testigos de cómo tres vehículos terminaron hundidos en medio de la calle porque la tierra colocada tras realizar una obra de cloacas cedió. Para colmo, una camioneta de Defensa Civil que acudió para ayudar también quedó encajada, y cuando lograron sacarla se fueron.
Las precipitaciones expusieron que el material con el que se rellenó la calle Código 1651 y María Filomena Montoya en el barrio Azcuénaga no eran los indicados para ese trabajo.
En el sector que queda entre el Km5 y Km8, en cercanías de un hotel íntimo, se había concretado una obra de cloacas para los habitantes. Sin embargo, al finalizarlo, “tiraron arriba greda, no mixto”, explicó una vecina a EL COMODORENSE.
“Cuando llueve a la greda le pasa esto. Venía notando que llovía y estaba como una pista de patinaje, todos se resbalaban. Y hoy se hizo una zanja en la calle”, añadió la mujer en diálogo con este medio.
El detonante fueron las copiosas lluvias y nevadas registradas desde la noche de este sábado, que erosionaron la calle al punto tal que se formó una zanja, que para colmo no era visible dado que la tapaba el agua.
Así las cosas, temprano quedó encajado un auto, y cuando lograron sacarlo, se hundió otro más en la esquina. Una camioneta también terminó metida de trompa en la calle y tenía las ruedas traseras suspendidas en el aire.
Por todo esto los vecinos llamaron a Defensa Civil para encontrar una solución inmediata o aunque sea una medida paliativa. Irónicamente, la camioneta que vino a auxiliar a los vecinos también quedó encajada, “y donde se liberaron se tomaron el palo”, dijo sin atenuantes la vecina.
“No ayudaron a nadie, no pusieron cono ni cerraron calles con cinta (mínimo). Se salvaron ellos y se fueron”, insistió, esperando una pronta respuesta y solución al problema generado por una mala culminación del trabajo realizado en el área.