Hay alerta entre economistas y analistas financieros por las reservas que están «quemando» el Banco Central y el Fondo Monetario Internacional para sostener el tipo de cambio en la previa electoral frente a una corrida cambiaria que no da respiro. En lo que va del mes, es decir en tan sólo 4 días, se «quemaron» US$1.433 millones.
El Banco Central se vio obligado a subir de nuevo la tasa de interés para que la clase media, bancos y fondos de inversión no salgan corriendo a cambiar pesos por dólares. La tasa de referencia (LELIQ) está en 62,28% y posiblemente tenga que subir aún más.
En los últimos días, economistas pusieron en debate el tipo de cambio real y los frenos que pone la autoridad monetaria para que no se desencadene una hiperinflación que está latente.
El economista Diego Giacomini, a su vez, advirtió que asuma quien asuma se enfrentará a un problema que será difícil de resolver en uno o dos mandatos: la escasez de divisas. En resumidas cuentas, alertó: «el Banco Central está quebrado y esta política monetaria pre-electoral lo está quebrando aún más».
Por si esto fuera poco, el analista financiero Christian Buteler detalló que «ventas sobre el cierre de ayer lograron marcar unos centavos más de baja» en la city porteña, graficando que «las reservas terminaron en US$66.458 millones. En el día bajan US$ 578 millones y en el mes caen US$ 1.433 millones».
Esto quiere decir que, más allá de la guerra China vs. USA y el frente externo, la Argentina entró en una desbalance macroeconómico producto del fuerte endeudamiento que generó la Administración Macri.
A mediados de julio pasado, se contabilizan un total de “reservas netas” en el orden de 16.700 millones de dólares. El lunes pasado, Giacomini informó que no superan los US$12 mil millones.
Lo que está claro es que no alcanza con la venta de contratos de Dólares a Futuro, subir la tasa de Leliqs y vender reservas «líquidas» del Banco Central. Argentina está obligada a crecer –según publica Urgente 24-.