Si bien hasta ahora la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia se había negado a avalar la fusión de Telecom Argentina y Cablevisión por las infracciones a la legislación vigente -se dijo que pedía modificar la ley para así evitar consecuencias contra las autoridades de la CNDC-, finalmente se ha conocido la resolución que esperaban los 2 empresarios detrás de esta megaoperación: el mexicano David Martínez y el argentino Héctor Magnetto, socios en Cablevisión, y que ahora extenderán su acuerdo a Telecom, que se fusiona por absorción con la empresa de TV por cable. La demora en la firma de la CNDC le había impedido al grupo comprador colocar una millonaria emisión de deuda en los mercados internacionales.
Era inevitable porque el Grupo Clarín, que se encuentra detrás de la fusión, es el gran aliado de Mauricio Macri, que atraviesa días horribles.
El control de Telecom Argentina fue durante años el objetivo de Héctor Magnetto, autoridad Nº1 de Grupo Clarín, y en extremo influyente como accionista de Cablevisión, y de ahora en más en Telecom Argentina.
Magnetto necesita la fusión entre Telecom Argentina y Cablevisión para que la empresa de TV paga no pierda su valor en un mercado en el que la telefonía móvil se convierte en el soporte dominante para la difusión de contenidos audiovisuales.
Magnetto había recibido de Carlos Menem, en los años ’90, la telco CTI Móvil, pero no pudo gestionarla con éxito, como tampoco lo logró con DirecTV Argentina, y debió abandonarla a su suerte. Hoy día es Claro, de América Móvil, cuyo accionista de control es el mexicano Carlos Slim Helú.
Luego de resolver sus dificultades financieras, en parte gracias a la protección que le concedió Eduardo Duhalde, vía la pesificación asimétrica de las obligaciones en moneda extranjera, y la declaración de los medios como patrimonio cultural que impedía a los acreedores ejecutar las garantías, Magnetto logró el respaldo de Néstor Kirchner para que su Multicanal lograra el control de una red de TV por cable muy superior, Cablevisión.
Esa disputa fue conocida como ‘la guerra entre Héctor Magetto y Raúl Moneta’.
Ocurrió una triple paradoja en esa circunstancia:
> Alberto Fernández, por entonces jefe del Gabinete de Ministros de la Nación, y enlace entre Kirchner y Grupo Clarín, le acercó a Magnetto el financista mexicano David Martínez;
> Raúl Moneta -banquero que integró el ex CEI Holdings y por lo tanto fue socio de Magnetto en la TV por cable- cometió el enorme error de rechazar la oferta de Martínez para una resolución amigable del conflicto; y
> Moneta apostó a que los problemas de salud consumirían a Magnetto y así debilitarían a Grupo Clarín pero ocurrió lo contrario: Magnetto se recuperó de su grave dolencia y Moneta terminó sufriendo un mal irrecuperable.
Magnetto y Kirchner, más tarde, se enfrentaron porque quedó planteada la puja por Telecom Argentina, que Néstor Kirchner pretendía se la quedaran otros empresarios vinculados a él.
Kirchner murió, la puja continuó, Cristina Fernández de Kirchner realizó mucho aspaviento pero no logró doblegar a Magnetto, quien apostó a Mauricio Macri, con él llegó al poder, y consiguió lo que buscaba.
De todos modos, Macri se demoró por las dificultades que anotó la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia en consolidar ese casi monopolio en diversas regiones del país.
Oscar Aguad fue al ex Ministerio de Telecomunicaciones a lograr precisamente la fusión. Y no lo consiguió porque nunca fue un funcionario muy idóneo.
No obstante, Macri tiene una capacidad de presión decreciente, y tuvo que atender en forma satisfactoria el reclamo o bien el compromiso con Magnetto.
La autorización que AT&T obtuvo en USA para quedar se con Time Warner contra la voluntad de Donald Trump, fue un valioso argumento a favor del reclamo de Grupo Clarín, que ya había designado a varios ejecutivos muy cercanos a Magnetto en lugares decisivos de Telecom Argentina.
La fusión estaba concretada de hecho, pero resultaba imprescindible institucionalizarla para la emisión de deuda necesaria para modernizar la red.
El viernes 29 se ha conocido el siguiente comunicado, que se refiere a condiciones que deberá cumplir Telecom Argentina para que se le autorice la fusión (que según Telefónica son requerimientos mínimos):
«Luego de cumplir un proceso de investigación y análisis durante casi 10 meses, la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) emitió hoy su dictamen sobre la operación de fusión de las empresas CABLEVISIÓN y TELECOM estableciendo remedios y obligaciones para garantizar condiciones de competencia en los distintos servicios involucrados en todo el país y realizando recomendaciones a la autoridad regulatoria, el ENACOM.
El dictamen, de cerca de 200 páginas, analiza los mercados y establece limitaciones a la operación de fusión que garanticen el cuidado de los derechos del consumidor y que, en línea con las tendencias internacionales, promuevan las inversiones y el desarrollo tecnológico del sector. En definitiva, impone obligaciones y realiza recomendaciones en cuatro planos: desinversión, ofertas comerciales, disponibilidad de la red y espectro.
El análisis de la CNDC incluye recomendaciones pro-competitivas sobre aspectos regulatorios, que resultan complementarias de las regulaciones vigentes y las obligaciones establecidas por el ENACOM. Recientemente se han producido cambios regulatorios que permiten que operadores de telecomunicaciones provean TV paga; el Ministerio de Modernización emitió un reglamento para la interconexión de redes y, además, el ENACOM estableció limitaciones a la empresa fusionada, incluyendo la devolución de espectro y límites a los precios en algunas regiones del país.
El presidente de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia, Esteban Greco, expresó: “Realizamos un estudio profundo del mercado con la participación de una cantidad importante de actores interesados, incluyendo empresas del sector, organizaciones de la soci edad civil y especialistas en el tema. Estamos convencidos de que este dictamen asegura condiciones en el mercado de las comunicaciones para que diferentes operadores de cuádruple-play y diversos oferentes de algunos de estos servicios a nivel nacional, regional y local puedan competir de modo eficaz para ofrecer a las empresas y las personas las mejores opciones posibles”.
“Apuntamos a que la estructura del mercado genere incentivos a la inversión de actores actuales o potenciales de manera de garantizar el desarrollo tecnológico imprescindible para el país”, aseguró Greco.
El dictamen es de acceso público y se encuentra publicado en la página web de la CNDC.
La Secretaría de Comercio y la CNDC son las autoridades d e aplicación de la Ley de Defensa de la Competencia y tienen la tarea de analizar los efectos de las operaciones de concentración económica sobre la competencia y prevenir que las mismas perjudiquen a los consumidores. Otras funciones relevantes de las autoridades de defensa de la competencia son las de investigar y sancionar conductas anticompetitivas y promover la competencia mediante recomendaciones para que los mercados funcionen correctamente.
Cabe destacar que en mayo se reglamentó la nueva ley de Defensa de la Competencia, que crea una autoridad con independencia política y que introduce el programa de clemencia y penas mayores para prácticas anti-competitivas, como un resguardo importante a la competencia futura en este y todos los mercados.
Tendencia de la industria en todo el mundo
La infraestructura de comunicaciones de un país es una de las bases para dinamizar la economía, mejorar los niveles de acceso a la información y a la educación, generar empleo a través de la atracción de inversiones y desarrollar el potencial de sus habitantes.
Los sectores de telefonía fija, comunicaciones móviles, provisión de servicios de internet y televisión por cable o satelital son objeto en todo el mundo de un proceso de convergencia debido al avance de la tecnología a ritmo acelerado que requiere grandes inversiones permanentes en infraestructura.
La tendencia mundial es hacia la generación de mercados integrados y competitivos con una cantidad más o menos limitada de competidores en cada región.