Los bancos se resisten a dar una compensación por los puntos perdidos y recalcular un premio por ganancias. Cómo siguen las revisiones en otros sectores.
Las primeras negociaciones salariales del año comenzaron con fuertes chispazos en el sector privado. Las tensiones emergieron en las últimas horas en los bancos y la industria de la carne, en donde los gremios buscan recuperar los puntos perdidos el año pasado frente a una inflación del 36% y sumar aumentos de cara al 2021, un combo que genera resistencia en el ámbito empresario.
En la actividad financiera, la paritaria se trabó el miércoles pasado durante la segunda audiencia virtual convocada por el Ministerio de Trabajo, por lo que se pasó a un cuarto intermedio hasta este miércoles a las 11. La Asociación Bancaria liderada por Sergio Palazzo pidió recuperar la diferencia pendiente del 2,1%, tras obtener un aumento del 34% en 2020. Pero los bancos se plantaron y dieron por clausurado el convenio vencido el 31 de diciembre.
«El 2020 ya cerró a nivel negociación a pesar de lo que pide La Bancaria», señalaron fuentes empresarias. De esa manera, las entidades buscan pasar a foja cero y avanzar en la pauta del año vigente, mientras que Palazzo advirtió que «ya es hora de respuestas». Además de recomponer los puntos perdidos, el líder bancario aspira una suba de los salarios acorde a la evolución de los precios ante un proceso inflacionario que en su propio gremio ven «difícil de contener» en 2021.
Si bien en un principio apostaba a cerrar un acuerdo «corto» por febrero y marzo, el sindicalista empezó a evaluar la posibilidad de un arreglo hasta octubre. La negociación tiene como telón de fondo el conflicto en el Banco Supervielle, donde el jueves pasado hubo un nuevo paro que se repertirá este martes y miércoles. El gremio denuncia situaciones de fraude laboral por tercerizaciones e incumplimiento de medidas sanitarias, reclamos que también forman parte del pliego de la paritaria.
El otro conflicto que asomó en la reunión con las cámaras bancarias (ABA, ADEBA, ABE y ABAPPRA) es por la participación en las ganancias o retorno sobre el capital (Return On Equity, ROE) que cobran los empleados a fin de año en función de los dividendos obtenidos por las entidades y cuyo cálculo se vio afectado el año pasado por el ajuste de los balances corporativos por inflación contable.
Por normas internacionales, la gestión previa al frente del Banco Central habilitó a los bancos a aplicar una nueva metodología a partir del 1 de enero de 2020, un cambio que implicó la reducción de las ganancias en términos nominales por el aumento de precios y una menor compensación salarial al personal por ese concepto. La Bancaria solicitó en diciembre la creación de una comisión tripartita para definir el nuevo cálculo.
«No quieren liberar el pago de plata del ROE, ahí tenemos un click que no se está cerrando», aseguraron desde el entorno de Palazzo.
El líder de La Bancaria busca recuperar los puntos perdidos y una suba actualizada por inflación en 2021.
Revisiones en la industria
Mientras tanto, el Gobierno apuesta a cerrar acuerdos «largos» para despejar la incertidumbre en un año electoral. Los docentes podrían ser los primeros en poner en práctica el acuerdo oficial de precios y salarios. El Ejecutivo apuesta a acoplar las paritarias en torno al 29% de inflación prevista en el Presupuesto ante las señales de aceleración de los precios en un año que las consultoras privadas prevén subas superiores al 4% mensual.
En la industria, el sector avícola iniciará esta semana la revisión de los salarios después de negociar un aumento del 25,4% en tres tramos el año pasado. El gremio de la alimentación se prepara además para negociar el convenio principal de la actividad en marzo, una discusión clave que estará cruzada por los incrementos de precios en los alimentos y los controles impulsados por el Gobierno.
Los sindicatos de la industria de la carne, en tanto, se declararon la semana pasada en estado de alerta y movilización ante la falta de respuestas a su reclamo de actualización. En agosto, el sector acordó un aumento del 28,3% en cuatro tramos y una revisión en enero del 2021. La Federación de Sindicatos de la Carne y Afines (Fesitcara) liderada por Gabriel Vallejos advirtió que la inflación «pulverizó» los salarios, por lo que busca un ajuste del 12% para llegar al 40% de aumento.
La organización elevó el tono de sus demandas un día después del acuerdo de precios sellado por los frigoríficos exportadores, los supermercados y el Gobierno. «De no haber respuestas, nos empujarán al conflicto y a la convocatoria de medidas de fuerza con afectación de las actividades en todos los frigoríficos y establecimientos cárnicos del país», advirtió Fesitcara en un comunicado.
En la industria de la carne, los gremios reclaman revisar los salarios del año pasado para llevar el aumento al 40%.
Los primeros acuerdos del año
Pese a las tensiones en el sector privado, el sindicato de comercio y las cámaras de la actividad cerraron el jueves pasado un aumento salarial no remunerativo del 21% en tres tramos a partir de enero. Los empleados mercantiles ya habían acordado un 12% en octubre pasado hasta marzo de este año, por lo que la nueva revisión implica una suba global del 33% en 2020. Así, el sueldo inicial comercio pasará de $46.790 a $56.615 (Maestranza A, sin presentismo).
El incremento se abonará en tres tandas del 7% no acumulativas en enero, febrero y marzo, tomando como base de cálculo el salario básico de diciembre de 2020 y los $5.000 de la suma no remunerativa acordada desde octubre pasado hasta marzo de este año. Con 1,2 millones de empleados, el sindicato liderado por Armando Cavalieri se convirtió en uno de los primeros en reabrir su paritaria después finalizar el año pasado con una diferencia de 24 puntos respecto de la variación de precios.
En la gran mayoría de las actividades, la evolución de los salarios fue por detrás de la inflación del 2020. Por ese motivo, varios gremios ya comenzaron a revisar los sueldos del período previo. En diciembre pasado, los aceiteros y recibidores de granos cerraron una suba del 35% por el 2020 y pactaron un ajuste del 25% hasta agosto de este año. Fue después de una inédita huelga de 21 días que paralizó los puertos de todo el país.
Fuente: iProfesional