Los principales contendientes en el Peronismo, Ricardo Sastre y Juan Pablo Luque, coinciden en que se deben adelantar las elecciones, a la vez que se eliminarán las PASO en la Provincia con el proyecto de ley que se trataría antes de fin de mes.
El Relevamiento de Expectativas de Mercado que medio centenar de consultoras hace mensualmente para el Banco Central, conocido la semana pasada, indica que tendremos a fin de año un promedio de aumento en los precios minoristas de poco más del cien por ciento este año.
Son los precios que paga la gente por el pan, la carne, las verduras, la indumentaria, los remedios, los servicios. La inflación es una verdadera licuadora en los bolsillos de los asalariados, y una fábrica de pobreza. Ayer, el kirchnerismo hizo difundir una encuesta de Analogías, la consultora preferida de la Vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Los números para el oficialismo son malos -según publica De Puño y Letra-.
Pero peor aún es la percepción que la población tiene del rumbo económico. Un voto castigo fenomenal por la situación económica no sería sorpresa el año próximo. Son veinte las Provincias que están en plan de adelantar sus elecciones. La mayoría de éstas son gobernadas por el Peronismo, o sus variantes, y unas pocas, por la oposición. Los oficialismos están en peligro y todos quieren salvar su territorio.
Hay que agregar a este panorama las tiranteces internas en el Frente de Todos, que podrían derivar en el quiebre del Gobierno el año que viene. Ello, porque el kirchnerismo viene cuestionando en voz cada vez más alta, y bloqueando, las necesarias medidas de ajuste que intenta aplicar el ministro de Economía Sergio Massa -que además es líder del Frente Renovador- para cumplir con el FMI.
El staff del Fondo acaba de advertir en su informe, que la economía argentina podría descarrilar el ajuste, por las elecciones del año próximo. De hecho, la quita de subsidios a las tarifas que se iba a aplicar ahora, fue nuevamente postergada. Tiene el aspecto de “Pagadios”.
¿A qué viene esta introducción “nacional”? A que este escenario concentra argumentos de mucho peso, que tanto Ricardo Sastre como Juan Pablo Luque, quienes aparecen como la principal oferta electoral del Peronismo provincial y sus aliados, insistan con todo lo que tienen en su operativo de “pinzas” que convenza al Gobernador Mariano Arcioni de adelantar las elecciones de gobernador e intendentes el año próximo, algo que el mandatario resiste con todo para no desmarcarse de Nación (es aliado de Sergio Massa), y también por un interés particular. El Gobernador piensa que si adelanta las elecciones, para las nacionales de Octubre en las que podría ser incluso candidato a diputado nacional, no va a trabajar “…ni Catulo”.
Adelantamiento de elecciones
Sastre y Luque estuvieron reunidos hace una semana en Comodoro. Un buen rato. Y coinciden en que se deben adelantar las elecciones, a la vez que se eliminarán las PASO en la Provincia con el proyecto de ley que se trataría antes de fin de mes.
Luego, confían en que el viaje de Arcioni a España servirá para darle al Gobernador una perspectiva distinta. El mandatario atraviesa un momento de buena relación con los Sastre, y de una apenas cordial, casi mala, con Luque.
El Intendente de Madryn, Gustavo Sastre, es parte de la comitiva del Gobernador a España. Y uno de los encargados del “alegato de oreja” en favor de desdoblar y adelantar las elecciones provinciales. La precaución del Peronismo está clara. Temen que la gestión nacional los arrastre y los “lleve puestos”.
Hay otras conversaciones al respecto. En la semana, Luque se reunió con Juan Manzur, el jefe de gabinete de ministros de la Nación. La foto no fue tan importante como su contenido. Hablaron más de una hora y media de política. Luque le explicó por qué las elecciones en Chubut deberían ser adelantadas. Manzur es uno de los funcionarios nacionales que más habla con Mariano Arcioni.
Recorrida por el interior de Sastre y Luque
Entretanto, Sastre y Luque recorren territorio. El vicegobernador desplegó una actividad enorme en la semana que pasó. Recorrió más de cinco mil kilómetros. Anduvo por todos lados. Pero no se limitó a las reuniones políticas con intendentes y dirigentes. El vicegobernador recorrió hogares de ancianos, gimnasios, entidades civiles, anduvo con la gente.
Hasta se hizo tiempo de jugar al truco con unos paisanos. Lo “gastaron” porque en una mano cantó 32 de envido, cuando parece que eran 22. “Lo que será cuando sea Gobernador”, le dijeron. Sastre volvió exultante de su gira. Siente que está bien con la gente. Sensaciones parecidas tuvo Luque en su recorrida, en una semana intensa que cerró ayer con el TC. Probablemente ambos se verán hoy en Camarones.
Ahora, si no hay PASO, es poco probable que se midan en una interna. Lo que intentarán determinar es en una medición, o en una serie de mediciones, serias e independientes, cuál de los dos está mejor para enfrentar a Juntos por el Cambio. Y si no hay acuerdo y ninguno se baja, no irán a internas. Terminarán siendo candidatos a gobernador por distintos partidos. De un modo u otro, no habrá internas. O acuerdan, o van por separado.