Se aprobó con 45 votos afirmativos, 24 negativos y una abstención. El Presupuesto contempla una inflación anual del 23%, una caída de la economía del 0,5% y un dólar a poco más de $40 promedio para el año entrante.
El gobierno de Mauricio Macri ya tiene su Presupuesto 2019. El oficialismo de Cambiemos consiguió en la madrugada de este jueves sancionar la “ley de leyes”, con apoyo de un sector del PJ y de fuerzas provinciales. Fue en una sesión con fuertes críticas del sector de la oposición que votó en contra, y cuestionamientos también entre quienes acompañaron la iniciativa. El rionegrino Miguel Pichetto llegó a hablar de la posibilidad de default de la deuda, «si no se ordena el rumbo».
A las 3.33, la pantalla marcó 45 votos afirmativos, 24 negativos y 1 abstención. El Presupuesto 2019 quedó convertido en ley, con más votos de los esperados. Por negociaciones del último día sumaron dos senadores fueguinos y otras dos santiagueñas, aunque tuvieron la baja del radical santacruceño Eduardo Costa, que enojado con la Casa Rosada porque no le dieron obras que reclama para su provincia, a la que aspira a gobernar en 2019, estuvo ausente de la sesión.
Tras el Presupuesto se votaron las leyes “complementarias”: el nuevo Consenso Fiscal también fue sancionado, con 48 votos afirmativos y 12 negativos. Y el proyecto de cambios a Bienes Personales, que con la modificación de dejar fuera del tributo a la la casa habitación, volvió a Diputados.
Pero el debate se centró en el Presupuesto y desde la medianoche tuvo el momento más esperado en los cierres de los jefes de los bloques.
Con previsibles críticas, Cristina Kirchner advirtió que con este Presupuesto “se va a profundizar el sufrimiento de la sociedad argentina, pero va a ser además un sacrificio inútil”.
“Ninguno de los que estamos sentados acá tenemos autoridad moral para decirle a la gente que se tiene que sacrificar, que tiene que seguir muriéndose de hambre”, afirmó.
La ex presidenta vaticinó que “la recesión se va a profundizar” y sostuvo que “es necesario tomar políticas públicas activas”, contrastando que a diferencia del actual en su gestión hubo presupuestos “expansivos”. Cristina dijo que el Gobierno va por “el peor camino” y que «va a dejar un país infinitamente peor del que recibieron”; fustigó que pese a sus “buenos modales” y “ser rubios de ojos celestes”, las inversiones “no vinieron”.
“¿No les parece que el país y el mundo que ustedes creían no es así?”, preguntó. Cristina habló casi 50 minutos, casi en un panegírico de sus años en el poder, sin ninguna autocrítica respecto del estado del país a su partida en diciembre de 2015.