En febrero, cuando todavía no había casos registrados de COVID-19 en el país, la utilización de la capacidad instalada de los distintos sectores productivos alcanzaba un promedio del 59,4%, según datos del Indec.
Según publica A24, los sectores relevados produjeron dos tercios de lo que podrían haber realizado si trabajaban a tope de máquina. En el medio, sucedió la pandemia.
El dato más reciente publicado el lunes por el Indec indica que el promedio del uso de la capacidad instalada fue de 60,8% en septiembre. Por primera vez desde el inicio de la pandemia, el indicador registró un valor superior al de febrero.
Si se comparan los valores de febrero contra los más recientes, varios rubros muestran haber recuperado la utilización de la capacidad productiva.
Los rubros de los minerales no metálicos y el sector automotriz (que no produjo ni un solo auto en abril) fueron los que más se recuperaron: cerca del 25%. Eso significa que por cada cuatro unidades producidas en febrero, en septiembre se fabricaron cinco.
El sector petrolero, cuya producción suele rondar el 80%, registró una utilización del 59%, apenas superior al 57% que tuvo en junio.
Por otro lado, el sector metalúrgico atraviesa una etapa de lento retorno a la producción que tenía previo a la pandemia. En septiembre produjo un 68% sobre su potencial óptimo, cuando en febrero esa cifra era de 73%.