El rotundo cambio de Guillermo Cañas, de las series de Copa Davis a la vida lejos de la Argentina

Podrá contarles a sus nietos que le ganó tres veces a un tal Roger Federer. Incluso, que en el historial contra el astro suizo quedaron 3 a 3, algo de lo que no muchos pueden jactarse. Desde hace unos años, siempre cerca de la raqueta, Guillermo Cañas eligió un rotundo cambio, porque pasó de las series de Copa Davis representando al país a una vida lejos de la Argentina.

Willy Cañas fue nacido y criado en La Matanza. Llegó al mundo el 25 de noviembre de 1977 y empuñó una raqueta por primera vez en el club Bomberos Voluntarios de La Matanza. Debutó como tenista profesional en 1995, ganó siete títulos ATP y su mejor ranking fue cuando llegó al número 8 del mundo en 2005.

Contra Roger Federer terminó con el historial igualado, con tres victorias para cada uno. Siempre se enfrentaron en torneos Masters 1000: el argentino se impuso en Canadá 2002, en Indian Wells 2007 y en Miami 2007.

El rotundo cambio de Guillermo Cañas

Cañas decidió dejar la Argentina luego de un violento robo que sufrió en septiembre de 2008, cuando un grupo de delincuentes lo interceptó en la casa de sus padres, en la localidad bonaerense de Tapiales, partido de La Matanza, y le robó su auto Mercedes Benz SL 500 descapotable, uno de los tres ejemplares de ese modelo que había en el país.

Luego de vivir ese hecho de inseguridad, armó las valijas y se mudó a Miami, Estados Unidos.Allí vive desde entonces con su pareja, la modelo brasileña Fabiana Semprebom. Su primer hijo, Juan, nació el 30 de mayo de 2014, mientras que su hija Liz llegó al mundo el 6 de octubre de 2021.

Fue también en Miami donde había anunciado su retiro del tenis. Lo hizo en marzo de 2010 en la sala de conferencias principal del Crandon Park. Sin embargo, nunca se desvinculó de ese deporte: continuó al frente de la Cañas Tennis Academy, un centro de entrenamiento que fundó al llegar a ese país, que funciona en el mismo club sede del torneo Masters 1000.

La academia que fundó Willy con sus amigos Martín García y Gustavo Oribe, cuenta con siete sucursales -una de ellas en Argentina-, y según explicó el mismo Cañas, antes se enfocaba en el entrenamiento de alto rendimiento, pero luego dejó la parte competitiva y se orientó más hacia las clases privadas.

A la distancia, y desde el sur de Florida, hace poco contó cómo veía al país. “Creo que la Argentina en los últimos quince años fue empeorando. Veo muy difícil que la gente joven pueda tener una esperanza para poder crecer ahí”, reflexionó. “Mi vida es muy tranquila en Miami. Nunca sentí esa falta de algo por dejar de ser jugador de tenis, no lo extraño”, aseguró el argentino en una entrevista.

Lo que más le divierte ahora es su nueva pasión por el pádel: “La adrenalina de la competencia que tenía la hago hoy en el pádel y me divierte muchísimo”, comentó sobre uno de sus pasatiempos que tiene en su nueva vida en Miami.

Para el extenista, que tuvo varios episodios violentos de inseguridad en la Argentina, la crisis que generó una disminución de la clase media ocasionó que “el deporte deje de crecer”, y lamentó que el tenis argentino no tenga “la gran magnitud que podría llegar a tener”.

Y ante la inevitable pregunta de si volvería a vivir en la Argentina, la respuesta fue contundente: “No. No quiero decir que no volvería a Argentina, amo Argentina. Pero mí país hoy es este. Hace 15 años vivo acá, y mi familia está criada acá. Tengo una empresa que costó muchísimo crearla y no me veo viviendo en ningún otro lado que no sea donde estoy. No es por Argentina en sí”.