Es la velocidad de viento que se registra en un huracán de categoría II.
Mientras que en el casco urbano de Comodoro el viento hace estragos con ráfagas de 120km/h, en los yacimientos petroleros la velocidad es notablemente mayor.
Es que al estar en medio del campo y no contar con reparo alguno, el viento corre libremente y deja ver su peor cara.
Fue así que durante la jornada se fueron registrando ráfagas de variada intensidad en los distintos yacimientos, aunque el récord hasta el momento se lo lleva Cerro Dragón, donde a las 15h se detectó una ráfaga de 180km/h.
Esta velocidad de viento puede registrarse en un huracán de categoría II, aunque en Comodoro llega a través de un feroz temporal que tiene a la ciudad en vilo.