Matías Saldivia, de 25 años, escapaba de la Policía cuando provocó el accidente el viernes a la noche en una calle del barrio San Cayetano.
En su huida de la Policía, el conductor alcoholizado atropelló con su Fiat 147 a las 23.30 del viernes a tres niños que jugaban en la vereda de la calle 553. Este domingo fue imputado de lesiones graves culposas por la conducción imprudente agravado por haberse dado a la fuga y por el alcohol en sangre.
Matías Saldivia recuperó la libertad, pero en su examen sanguíneo además de 2,66 g/l de alcohol en sangre, dio positivo de cocaína. Los nenes atropellados tienen 2, 6 y 8 años.
El conductor escapaba de personal de la Seccional Sexta que procuró identificarlo tras haber realizado maniobras peligrosas frente a la plaza del barrio. El conductor escapaba de la Policía cuando al pasar a toda velocidad por la calle 553 perdió el control y se estrelló contra el portón de la vivienda de la familia Mambrín, en donde atropelló a los tres niños que allí jugaban.
Dos de los tres hermanitos sufrieron traumatismos y lesiones leves, mientras que el restante sufrió la fractura del antebrazo izquierdo.
Al impactar contra el portón, el auto no siguió avanzando, ya que de lo contrario los niños en vez de ser apretados hubieran sido aplastados contra el vehículo de la familia estacionado en el garaje.
Saldivia escapó del lugar dejando abandonado el vehículo con bebidas alcohólicas en su interior. La Policía lo persiguió y atrapó.
El domingo Saldivia fue llevado a audiencia de control de detención y formalización de la investigación ante el juez Martín Cosmaro y fue imputado por la funcionaria de fiscalía, Florencia Do Carmo, por lesiones graves culposas por la conducción imprudente de un vehículo automotor agravado por haberse dado a la fuga y por detentar alcohol en sangre en concurso ideal con lesiones leves culposas.
En la extracción sanguínea según detalló el Ministerio Público Fiscal, además de 2,66 gramos por litro de sangre, también dio positivo de alcaloides de cocaína.
El juez Cosmaro decretó legal la detención y dio un plazo de investigación de 6 meses. La Fiscalía no solicitó ninguna medida de coerción –ya que la expectativa de pena tiene un mínimo de dos años de prisión- y ante la falta de antecedentes computables, Saldivia recuperó la libertad.
