La explicación que ensayó el Gobierno al término de una jornada cargada de tensión: Al final de un día complicado y cargado de rumores, Dujovne buscó transmitir tranquilidad y consideró que la suba del dólar pudo haber sido porque el anuncio de Macri no abundó en precisiones. El Presidente no alteró su agenda.
“Se pensó que la jugada de anunciar lo del FMI iba a ayudar a llevar tranquilidad. Pero nadie nos cree. El mercado no nos cree. Y tampoco estamos leyendo bien qué es lo que quiere el mercado”. El habitante de la Rosada resume el ánimo que se vivió ayer en el Gobierno, que fue de la incertidumbre a la preocupación por la escalada del dólar luego del mensaje presidencial de la mañana en el que anunció el adelanto del fondos del FMI. El mandatario siguió con su agenda habitual, mientras algunos de sus adláteres se sorprendían de que no llamara a una reunión de emergencia. Por la tarde, el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, salió por segunda vez a anunciar lo mismo, a ver si en esa oportunidad funcionaba. Sobre la suba brusca de la cotización del dólar después del mensaje presidencial ensayó solo esta explicación: “El presidente se vio en la necesidad de anunciarlo para evitar las filtraciones. Entendemos que al no haber dado detalles puede haber generado incertidumbre”.
Fue un día de rumores salvajes, que hablaban de salidas de figuras del equipo económico o incluso del jefe de Gabinete, Marcos Peña. “No hay nada cierto. Por ahora, son sólo eso: rumores”, comentaban en Balcarce 50. Sin embargo, las versiones indican una determinada presión de sectores empresariales.
–El mercado pide la salida de Marcos –confió a este diario uno de los dirigentes macristas con más experiencia en crisis políticas. ¿Quiénes son “el mercado”? En el oficialismo no terminan de decidirse a identificar a qué sectores empresariales se refieren, aunque indudablemente la UIA aparece entre ellos. “Marcos quedó como la persona del Gobierno que es antipolítica, antiempresarios, antiperiodistas. Marcos no es todo eso, pero en ese país te estigmatizan”, se quejaba el dirigente oficialista, que se sorprendía de que Macri no llamara, de mínima, a su mesa chica para analizar la situación económica. O al gabinete económico. O a Dujovne.
Nada de eso sucedió. Macri siguió con su agenda y a la tarde fue a una sede de la empresa Mercado Libre, donde se reunió con empresarios de comercio (en particular, de supermercados) y sindicatos. Fue un encuentro de la mesa de comercio, organizado por el secretario del área, Miguel Braun, en el que estuvieron también el titular del Banco Nación, Javier González Fraga y el ministro de Trabajo, Jorge Triaca. Del encuentro participaron supermercadistas como Alfredo Coto y banqueros como Gabriel Martino, del HSBC. Por lo veloz de la organización de la reunión no estuvo el titular de Mercado Libre, Marcos Galperín.
Si la decisión de que Macri siguiera con su agenda como si nada estuviera pasando buscaba mostrar tranquilidad, en su gabinete reinaba cualquier cosa menos la calma. No hubo una línea clara de qué transmitir ante el dólar que se desataba después del mensaje del Presidente, que buscaba el efecto exactamente contrario. “Hay mucha preocupación”, indicó otro funcionario, como si faltara aclararlo. “Reuniones por el tema hay”, aclaró.
Luego de un día de silencio, se decidió que Dujovne saliera a reafirmar el mensaje del presidente. Para eso, no obstante, decidieron esperar a que el FMI comunicara oficialmente el acuerdo con la Argentina. Cuando se hizo público, de forma veloz el ministro de Hacienda convocó a una breve conversación con los periodistas que estaban en Casa Rosada. La llamó unos minutos antes. Pese a los intentos de transmitir normalidad, de entrada hubo algo extraño: el lugar elegido por el ministro no fue su ministerio sino la Rosada. Dujovne entró en la Sala de los Científicos intentando no transmitir nerviosismo. Hasta esbozó una sonrisa.
Luego de reiterar el anuncio que hizo Macri, vino la pregunta obvia sobre cómo reaccionó el mercado cambiario: con una suba del dólar que superó los 34 pesos. Allí el ministro de Hacienda ensayó una explicación: “A la mañana teníamos un entendimiento con el FMI, pero no podíamos dar detalles. Entendemos que eso puede haber generado incertidumbre. En la medida en la que estamos dando detalles se va a reducir volatilidad en los días siguientes”, pronosticó. Paradójicamente, en la breve conferencia de prensa no dio demasiados detalles. ¿Para qué se apuraron a hacer el anuncio, entonces? “El presidente se vio en la necesidad de anunciarlo para evitar las filtraciones. Entendemos que al no haber dado detalles puede haber generado incertidumbre”, repitió Dujovne, por toda explicación oficial sobre lo sucedido ayer. Luego culpó de lo que está ocurriendo a “la fenomenal corrupción del Gobierno anterior, que frenó la llegada de inversiones”.