Los futuros del crudo Brent caían 47 centavos, o un 0,57%, a 81,87 dólares el barril a las 1034 GMT, mientras que los futuros del crudo West Texas Intermediate (WTI) de Estados Unidos bajaban 48 centavos, o un 0,62%, a 76,56 dólares, publicó La Nación.
El martes, los contratos del Brent y el WTI cayeron desde máximos cercanos a tres semanas, cediendo un 1,5% y un 1,4%, respectivamente.
La prima de los futuros de abril del Brent respecto a los contratos de septiembre alcanzó el lunes su nivel más alto desde el 31 de octubre, a 3,64 dólares por barril -en una estructura conocida como backwardation y una señal de un mercado con suministros ajustados-, aunque desde entonces ha caído a en torno a los 3,37 dólares.
La inquietud ante la posibilidad de que los recortes de tasas de la Reserva Federal se retrasen más de lo previsto ha lastrado las perspectivas de la demanda de petróleo. Los datos de inflación de Estados Unidos de la semana pasada hicieron retroceder las expectativas de un inicio inminente del ciclo de relajación de la Fed, y los economistas encuestados por Reuters prevén ahora un recorte en junio.
Pero los ataques de los hutíes contra buques comerciales en el mar Rojo y el estrecho de Bab al-Mandab han seguido avivando la preocupación por los flujos de mercancías a través de la crítica vía navegable. Los ataques con drones y misiles han alcanzado al menos a cuatro buques desde el pasado viernes.
La diplomacia en Oriente Medio sigue sufriendo reveses. El martes, Washington volvió a vetar un proyecto de resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre la guerra entre Israel y Hamás, bloqueando la exigencia de un alto el fuego humanitario inmediato.
En su lugar, Estados Unidos está presionando para que el Consejo de Seguridad adopte una resolución que vincule el alto el fuego a la liberación de los rehenes israelíes por parte de Hamás. (Reporte de Robert Harvey en Londres, Mohi Narayan en Nueva Delhi, Andrew Hayley en Pekín.