El poder de compra de alimentos del salario mínimo en la Argentina está entre los peores del mundo, así lo demuestra un reciente trabajo del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (Celag).
Este fenómeno combina dos tendencias: el encarecimiento relativo en dólares del país, asociado a una tasa de aumento del dólar oficial bastante menor al ritmo de la inflación, y por otro lado al congelamiento relativo de buena parte de las paritarias.
Un litro de leche en Argentina cuesta igual que en Francia y es más caro que en Finlandia y España, muestra el informe. A su vez, comparado con América Latina, Argentina es el país donde el salario mínimo permite comprar menor cantidad de kilos de carne picada.
Sobre el vencimiento del plazo del pago, la Disposición establece que se deberá realizar bajo el concepto a cuenta del acuerdo paritario del mes de marzo y abril del año 2024.
El salario mínimo permite comprar una cantidad similar de kilos de arroz en Argentina que en Kenia, pero Argentina tiene un precio en dólares similar al de Suecia y Canadá.
En cuanto a la media docena de huevos, en Argentina el salario mínimo permite comprar una cantidad similar a la que compra en Túnez y Nigeria, pero el precio en dólares es como el de Suecia y Bélgica.
Salarios: Por qué van a perder más poder de compra de lo que marquen las estadísticas
El efecto de licuación de los salarios va a ser más profundo este año de lo que puedan indicar las diferentes encuestas, tanto oficiales como privadas.
Por efecto de la suba de las tarifas, la pérdida del poder de compra de los sueldos va a ser superior a lo que pueda diluir nominalmente la inflación.
Así lo señala en un informe la consultora Abeceb, en el cual plantea que el “salario disponible”, es decir, la capacidad de compra de los ingresos descontado el efecto de licuación, perderá hasta el 15%.
“Un trabajador que en promedio en 2024 va a ganar $1.340.000 mensuales y que su salario le va a caer en términos reales 6,1%, lo que le quede para gastar, después de pagar el alquiler, combustible, transporte, luz, gas (estos componentes que aumentan muy por encima de la inflación) serán $840.000, lo que implica una caída de 15,5% respecto del ingreso disponible que tenía el año pasado”, señala el reporte.
De acuerdo con los últimos datos sobre evolución de salarios que elabora el INDEC, en febrero los sueldos crecieron 8,9% nominal, con un 152% interanual. Los del sector privado registrado subieron 11%, el sector público 5% y el no registrado 7,6%. por debajo de la inflación.
La consultora que dirige el ex ministro de la Producción Dante Sica, señala que “el salario real en el sector privado formal podría caer en promedio 6,1% en 2024, pero el ingreso disponible podría reducirse más del doble producto del fuerte reacomodamiento de los precios relativos de las tarifas de gas, luz, agua, transporte público, combustibles”.
El estudio sostiene que el valor de todos esos servicios públicos “vienen ajustando muy por encima de la inflación impactando con fuerza en los bolsillos”.
La retracción del poder de compra se da en el marco de un proceso muy fuerte de corrección de precios relativos que venían muy atrasados y que provoca que la gente deba gastar mucho más de lo que lo hacía anteriormente para afrontar esas facturas, recortando la plata disponible para comprar otros bienes o servicios.