Se reunieron para analizar su futuro y quedaron marcadas dos posiciones entre los presidenciales. Felipe Solá y Mario Das Neves son los más críticos con el espacio; mientras que Duhalde y Rodríguez Saá son más cautos. Nadie quiere mezclarse con el kirchnerismo ortodoxo pero todos olfatean el futuro del peronismo sin Kirchner. Anarquía en la provincia: Graciela Camaño larga línea propia y De Narváez está aislado.
Los cuatro candidatos a presidente del peronismo federal mantuvieron un duro debate el martes por la noche, en el que quedaron marcadas las diferencias entre Felipe Solá y Mario Das Neves con Eduardo Duhalde y Adolfo Rodríguez Saá.
Tal como había adelantado LPO, sólo coincidieron en ratificar sus aspiraciones de llegar a la Casa Rosada y su oposición al “modelo” que profesa el Gobierno, ya sin su mayor exponente. Pero mientras Solá y el gobernador de Chubut fueron autocríticos con el peronismo federal como espacio, Duhalde y el puntano lo defendieron.
Solá y Das Neves se reunieron en privado antes de ir a la residencia de Adolfo Rodríguez Saá a juntarse con el otro dueto de candidatos. “Coincidimos en que el sector no contagia no va para ningún lado, incluso antes de la muerte de Kirchner. Pero Duhalde y Rodríguez Saá no lo pensaron así”, estimó una fuente cercana a uno de ellos.
Su problema es que por ahora siguen en busca de una propuesta superadora que confronte esa tesis. “Sólo sabemos que no estaremos con el kirchnerismo, que la vuelta del Frepaso”, ironizan.
Aunque no lo digan, la falta de llegada a la sociedad que acusan se tornó un problema mucho mayor sin Kirchner en escena. Al ex presidente todos aspiraban vencer en una segunda vuelta a partir del rechazo que genera en parte del electorado. Cristina, ungida a la reelección por sus más cercanos, no permite a una especulación semejante.
El duhaldismo rechaza de plano esa tesis y dice tener 14% de intención de voto. “Sumado al resto de los aliados podemos superar la barrera de los 20. Kirchner tenía sólo 21. Todavía falta mucho”, insisten.
“Nosotros no queríamos hacer nada por un tiempo, pero vamos a estar en Chubut con Das Neves y en Corrientes. Quizá la preocupación de él y de Solá es que no miden”, confían cerca de Duhalde.
Mientras miran con recelo las encuestas, los cuatro dudan del viraje que tendrá el peronismo sin su líder, pero con una candidata con chances como la presidenta. Coinciden, eso sí, en que sin Kirchner el PJ no tiene líder y puede tomar distintos rumbos.
“Nacimos para proponer al peronismo y a todos los argentinos un proyecto superador al kirchnerismo. Nuestro objetivo no fue estructurar una fuerza política para enfrentar a un hombre. Es y seguirá siendo producir un profundo cambio en el país”, reza uno de los párrafos del comunicado conjunto.
Solá y Das Neves, según otra fuente que pasó por la casa de Rodríguez Saá, fueron los menos preocupados por la arremetida del kirchnerismo post muerte de Kirchner.
Sobre todo por la radicalización que mostró la presidenta tras el duelo, mezclándose más con su núcleo duro que con el peronismo orgánico, con el que los díscolos encuentran muchos puntos en común, pero los divide el kirchnerismo.
Fuente: La Polótica Online