Por primera vez en la historia desde el regreso de la democracia, una elección general en nuestra provincia no tendrá boletas del Partido Acción Chubutense. Su precandidato a diputado nacional, Roque González, no logró el piso del 1,5 por ciento de votos y no pasó las primarias. “Lo nuestro fue pésimo y la verdad es que no trabajamos para esto –se sinceró-. Pensábamos que la cosa tendría otra dimensión pero la manifestación del pueblo es inapelable”.
El diputado provincial advirtió en el diario Jornada que “asumo toda la responsabilidad porque me equivoqué al preservar lo institucional”. González admitió que “tendría que haber hecho mayor hincapié en la parte electoral. Teníamos el control del partido como para haber forzado un acuerdo como se hizo en 1999, pero nos pareció que al no haber demasiado consenso no era bueno”. Con el diario del lunes, dice que lo mejor era unir su boleta a la de Cristina en un acuerdo explícito con el Frente para la Victoria. Alguna dirigencia del PACh se opuso y prefirió no generar revuelo. “Fue una equivocación porque hicimos una elección tan mala como la de 2007”.
“Nos fue mal y me tendré que hacer cargo yo”, le dijo a Jornada González, quien predice un PACh pleno de debates inminentes para saber qué hacer. “Hay que discutir y analizar todo; asumo todos los costos de esta mala elección y no uso ninguna excusa. Soy responsable de todas las actitudes que se tomaron pero sí reivindico que no estaba equivocado al hablar hace un año y medio de ver cómo nos podíamos articular para que Cristina sea reelecta”. Pese a este deseo, “fracasé en poner al PACh en la mejor posición electoral y mi error fue haber hecho un esfuerzo muy grande para preservar lo institucional. Esos esfuerzos fueron titánicos y no generamos alianzas; tratamos de hacer todo y lo electoral no funcionó. Me equivoqué, es así de claro y hay que poner el pecho”.
De su futuro dijo que seguirá trabajando porque “la política no se deja nunca” aunque “los chubutenses me pusieron en el llano y desde ahí voy a trabajar”. En esta hora difícil González recordó que algún grupo de dirigentes pachistas especuló hace un tiempo con “la disolución del partido, un mecanismo previsto en la ley electoral. Pero jamás votaré para que este Partido desaparezca. Pero si hay una mayoría que lo quiere voy a tener que acatar, esto es así de claro. Tampoco me iré a mi casa ni ofendido ni desencantado con la política”.
Roque admitió que no conseguir el 1,5 por ciento “era un riesgo” aunque “no es que no lo quisiera ver pero trabajamos para sacar 70 mil votos, no sólo para pasar. Quisimos brindar una opción desde un espacio no peronista pero la gente no lo vio así. Y acá estamos”
