La paradoja es que se presenta como una herramienta que vende a sus usuarios que pueden estar tranquilos y que tienen a alguien en quien pueden confiar.
La aplicación de citas Tinder anunció la semana pasada la creación de un botón de pánico, una medida para ofrecer algo de seguridad a sus usuarios, especialmente mujeres, para que puedan avisar en caso de agresión durante una cita. Este botón de pánico conecta cada usuario con un servicio de emergencia que responde en caso de alerta.
Para desarrollar este servicio, Tinder ha contado con la ayuda de una compañía llamada Noonlight. Los usuarios de Tinder pueden informar de los detalles de su cita y su ubicación en caso de que sea necesario avisar a la policía.
Para hacer uso de este botón de pánico, los usuarios de Tinder deben descargar la aplicación gratuita Noonlight, además de la aplicación de citas, para habilitar estas funciones de seguridad dentro de Tinder. El problema es que, al tratarse de una aplicación gratuita, la protección de datos de los usuarios está en cuestión.
El diario digital Gizmodo informó que la aplicación de Noonlight no es una excepción a las prácticas habituales sobre los datos de los usuarios. Tras descargar la aplicación y monitorear el tráfico de red enviado a sus servidores, Gizmodo descubrió una lista de compañías que se dedican a la tecnología publicitaria, incluidos Facebook y YouTube, propiedad de Google. Estas compañías estarían obteniendo datos de los usuarios de Tinder a través de Noolight.
La paradoja es que Noonlight se presenta como una herramienta de seguridad que vende a sus usuarios que pueden estar tranquilos y que tienen a alguien en quien pueden confiar.
Pero al mismo tiempo, permiten que los datos de sus usuarios vayan a parar a manos de terceros, que no son precisamente los agentes de policía que deben velar por las citas segura, sino otro tipo de empresas que hace negocio con la publicidad online.
Noonlight informa en sus condiciones de uso que al utilizar el servicio «nos autoriza a compartir información con los socorristas de emergencia relevantes. Además, podemos compartir información […] con nuestros socios comerciales, proveedores y consultores externos que realizan servicios en nuestro nombre o que nos ayudan a proporcionar nuestros servicios, tales como contabilidad, gerencia, técnico, marketing o análisis».
Según ha contrastado Gizmodo, estos «socios comerciales» de Noolight incluyen marcas como Facebook y YouTube, así como Branch y Appboy, que están especializadas en conectar el comportamiento de un usuario determinado en todos sus dispositivos para fines de reorientación publicitaria. Otra empresa es Kochava, un centro importante para todo tipo de datos de audiencia obtenidos de una cantidad incalculable de aplicaciones.
En respuesta a las informaciones publicadas por Gizmodo, el cofundador de Noonlight, Nick Droege, explicó que «Noonlight utiliza a terceros como Branch y Kochava solo para comprender la atribución estándar del usuario y mejorar la mensajería interna en la aplicación. La información que recibe un tercero no incluye ningún dato de identificación personal. No vendemos datos de usuarios a terceros con fines de marketing o publicidad. La misión de Noonlight siempre ha sido mantener seguros a nuestros millones de usuarios».