La Federación de Trabajadores de la Salud anunció paros de 4 horas por turno para el 1 y 2 de julio. “Si no recibimos un aumento en las prestaciones, no podemos afrontar los aumentos salariales”, explicaron desde la Federación Argentina de Prestadores de Salud.
En medio de la pandemia, y cuando la segunda ola de COVID-19 sigue preocupando a las autoridades nacionales y provinciales, un conflicto salarial y económico amenaza con dificultar la normal atención de los pacientes en clínicas, sanatorios y hospitales privados publica Infobae.
Por un lado, la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina (FATSA), cuyo Consejo Directivo está liderado por Héctor Daer y Carlos West Ocampo, convocó a “un paro nacional de actividades de cuatro horas por turno los días jueves 1 y viernes 2 de julio, ante el fracaso de las negociaciones paritarias”.
A partir del día de hoy y hasta el 30 de junio, se realizarán “asambleas informativas en todos los sectores y turnos de cada establecimiento” para “debatir las medidas dispuestas”.
También desde esta mañana, la Asociación de Trabajadores de la Salud (ATSA) comenzó con movilizaciones en 12 puntos de la Ciudad de Buenos Aires, pero sin interrumpir el tránsito. Estas medidas se mantendrán también hasta el miércoles próximo.
Hasta el momento no hay una nueva reunión en el Ministerio de Trabajo, por lo cual el conflicto está trabado. Las miradas están puestas en la cartera que comanda Claudio Moroni. En marzo ya había decretado una conciliación obligatoria por medidas de fuerza dispuestas por el gremio.
EL SISTEMA DE SALUD PRIVADO EN CRISIS
Por otro lado, la Federación Argentina de Prestadores de Salud (FAPS), como anticipó Infobae, el jueves pasado mantuvo una nueva reunión en el Ministerio de Trabajo de la Nación para volver a fijar su posición: “Si los prestadores no reciben el aumento de aranceles necesario para afrontar las paritarias 2021, no se podrá avanzar en la negociación paritaria”, aseguraron.