El domingo será otra vez negro para Cambiemos, que confía en ganar las legislativas correntinas. Uñac y Herrera Ahuad, favoritos. Esperan un alivio en Corrientes.
El domingo abre una larga serie de elecciones provinciales durante el mes de junio, durante el cual el Gobierno nacional espera empezar a cambiar la tendencia con comicios en las tres provincias que gobierna el radicalismo: luego de las legislativas en Corrientes será el turno de las PASO en Mendoza y la general en Jujuy, ambas el 9 de junio.
El resultado más previsible de este domingo es el triunfo de Sergio Uñac en San Juan. El gobernador ganó en marzo las primarias con casi el 56 por ciento de los votos y todo indica que repetirá. En su entorno incluso confían en ampliar la diferencia sobre Marcelo Orrego, el candidato del Frente Con Vos (la versión local de Cambiemos), que en las PASO sacó el 32 por ciento.
Será la décima derrota de la Casa Rosada en el año, aunque en rigor el apoyo nacional a Orrego fue casi nulo. El propio candidato se despegó cuanto pudo de Mauricio Macri. La expectativa nacional estará puesta en las posibles definiciones de Uñac, que esta semana le hizo un guiño a la fórmula Alberto Fernández-Cristina Kirchner, tras haber empujado anteriormente la candidatura de Roberto Lavagna.
En Misiones también se espera una categórica derrota de Cambiemos, que lleva como candidato a gobernador nada menos que al presidente del PRO nacional, Humberto Schiavoni. El dirigente la tiene difícil ante el poderoso Frente Renovador de la Concordia, que postula al vicegobernador Oscar Herrera Ahuad.
Las encuestas que circulan en la provincia auguran un triunfo de Herrera Ahuad con más del 50 por ciento de los votos, mientras en Cambiemos admiten que superar los 30 puntos sería una muy buena elección. Además del poderío del oficialismo provincial (que gobierna desde 2003), el derrumbe de la imagen de Macri golpeó a Schiavoni y a los candidatos a intendentes de las ciudades grandes, que hasta hace un tiempo confiaban en pelear en igualdad de condiciones. La aprobación del presidente ronda los 20 puntos en Posadas y Oberá, y cae más todavía en el interior de la provincia.
Una novedad es que el kirchnerismo no tendrá lista propia en estas elecciones. Aunque nunca pudo hacer pie en Misiones, el FPV siempre presentó oferta electoral. Ahora Rovira logró sumar a una parte importante a su espacio, mientras que otro sector acompaña al Frente Popular Agrario y Social. Meses atrás, en Cambiemos confiaban en una lista kirchnerista que le arañe entre 8 y 10 puntos al oficialismo.
Como en San Juan, en Misiones también hay expectativa sobre alguna señal nacional de Rovira y Herrera Ahuad. Hasta ahora, el único que se posicionó fue Closs, que apoyó públicamente a Alberto Fernández. Pero desde el gobierno provincial evitan cualquier posicionamiento. Passalacqua había participado de una cumbre de Alternativa Federal, aunque como el resto de los gobernadores se terminó alejando.