El Gobierno guardó silencio ante el impacto de la inflación y se aferra a los primeros datos de abril

El Presidente monitoreó el golpe del incremento de los precios desde el sanatorio Otamendi; sin voceros oficiales, la Casa Rosada se replegó; los argumentos por los cuales el Gobierno anticipa una baja el mes próximo….

miércoles 13/04/2022 - 23:21
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El Presidente monitoreó el golpe del incremento de los precios desde el sanatorio Otamendi; sin voceros oficiales, la Casa Rosada se replegó; los argumentos por los cuales el Gobierno anticipa una baja el mes próximo.

La cifra de la inflación golpeó con fuerza en la Casa Rosada, que decidió guardar silencio. En el peor día en materia económica desde que asumió hace 27 meses, el Gobierno se replegó. “Ya sabíamos lo que se venía”, admitieron muy cerca del presidente Alberto Fernández. Esa fue la razón por la que el ministro de Economía, Martín Guzmán, ratificado en su cargo, salió el lunes públicamente a dar explicaciones, consigna La Nación.

Pese a que la inflación de marzo se disparó a 6,7%, lo que se transformó en el peor dato mensual en los últimos 20 años y con 16,1% acumula el peor trimestre de inflación desde 1991, en el gobierno nacional aseguraron que los datos de abril muestran una “desaceleración”, especialmente en el rubro alimentos. Con cautela, cerca del Presidente hablan de que marzo fue el techo del año.

En un escenario de crisis, hay tres datos con los que el Gobierno argumenta que la inflación de este mes será inferior: una menor emisión monetaria, menor brecha cambiaria y menos déficit. A eso, según explicaron fuentes oficiales, se sumó que se morigeraron los efectos inflacionarios sobre los alimentos en el mundo.

Si bien nadie se anima a dar una cifra, en Balcarce 50 son optimistas de que abril marcará el camino de la curva descendente. Los primeros datos de abril refuerzan el moderado entusiasmo.

Eso sí, en las explicaciones del gobierno nacional no se hace mención a que el índice de marzo se produjo con las tarifas de los servicios públicos retrasadas y un dólar atrasado. Tampoco a los efectos de la interna entre el Presidente y la vicepresidenta Cristina Kirchner.

Fernández, que este jueves dejará el sanatorio Otamendi tras el nacimiento de Francisco, habló varias veces con Guzmán, entre otros ministros, con los que monitoreó el impacto del índice.

Sólo en lo que va del año, la suba de precios trepó al 16,1%; en los últimos 12 meses llegó al 55,1%. Desde que asumió el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, el guardián de los precios al que le delegó la responsabilidad la expresidenta, la inflación se duplicó. Sólo en el rubro alimentos, que impacta principalmente en los sectores más vulnerables, aumentó un 15 por ciento en 60 días.

Si bien no hubo voceros oficiales, la respuesta del gobierno nacional al dato de marzo llegó a través del Banco Central con la suba de la tasa de interés nominal anual de las Letras de Liquidez (Leliq) a 28 días, que pasaron de 44,5% a 47%.

El Gobierno buscó anticiparse a los efectos del número de la inflación con la presentación de Guzmán el lunes en una entrevista en C5N. Ahí, tras acordar la estrategia con Alberto Fernández, el titular del Palacio de Hacienda anticipó que los incrementos superarían el 6%.

Además, con la promesa presidencial de que tiene las manos libres para efectuar los cambios que considere necesarios, Guzmán anticipó que en la etapa que viene gestionará “con los que estén alineados con este programa económico”. Y agregó: “No es un problema de nombres sino de rumbo”.

La reacción de Guzmán, que por primera vez se mostró lejos del “modo zen”, fue acompañado por varios ministros. “Se gobierna con los que están dispuestos a acompañar. La última palabra es del Presidente. Los que no están de acuerdo, como mínimo, no deberían estorbar”, sostuvo el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, que se describió como un “hincha de Guzmán”. Además, hablaron la secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra, y el ministro sin cartera, Agustín Rossi.

A casi un mes de la declaración de guerra contra la inflación, según las palabras del jefe del Estado, el Gobierno aún no logró frenar la espiral ascendente de los aumentos. Incluso, el 6,7% que informó el Indec fue más elevado que el número que esperaban las consultoras privadas, lo que elevó una proyección para este año de 60,9%.

Los malos resultados económicos son la principal diferencia entre el Presidente y su vice, quien impulsa la ofensiva contra Guzmán y el resto del equipo que habita el Palacio de Hacienda. Pese a la presión, Fernández ya resolvió que no cambiará a su ministro. ¿El resto de los funcionarios del área? Todo está en discusión, aseguraron fuentes oficiales.

Uno de los principales apuntados es Feletti, que ayer protagonizó un acto con el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, uno de los que cuestionaron al Presidente en las últimas semanas. La fotografía del mandatario provincial y el secretario de Comercio Interior horas antes de la presentación del dato de marzo cayó mal en el albertismo

Sin defensa pública, la oposición cargó con dureza contra el gobierno nacional. En esto no hubo grieta: desde el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, a la diputada nacional del Frente de Izquierda Myriam Bregman. En todos los casos, la crítica se concentró en la interna del Frente de Todos.

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