Por este motivo se extendieron las restricciones a la exportación de carne como forma de moderar los precios. La dirigencia rural rechaza y amenaza con un cese de comercialización.
El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, defendió las medidas impuestas sobre el mercado de la carne, que incluyen la restricción a las exportaciones, y dijo que se busca «armonizar la demanda» y que bajen los precios.
«El dato de julio marca que se exportaron 194 millones de dólares, una cifra muy por encima del promedio histórico del último quinquenio», explicó Kulfas en declaraciones a radio La Red.
Y agregó: «Lejos de estar en un cepo, estamos en un contexto en el que estamos armonizando la demanda interna, para que el precio de la carne deje de subir». «Tenemos que tener un mecanismo de administración del mercado y eso es lo que estamos haciendo», concluyó.
En la misma línea, el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, afirmó que el mercado local «se está acomodando» y que cuando esté «plenamente estabilizado» el Gobierno abrirá las exportaciones de carne vacuna «en su totalidad».
En el sector «no están pasando un mal momento. Si puede ser que porque los precios se acomodaron un poco internamente, estén ganado un poco menos, es probable. Pero bueno, estamos saliendo de un crisis y pensando en todos los argentinos», sostuvo Moroni en diálogo con la prensa en Casa de Gobierno.
«El Gobierno quiere proteger tanto a la industria para que exporte como a los precios del mercado interno. El mercado local se está acomodando y cuando veamos que está plenamente estabilizado serán abiertas las exportaciones en su totalidad», enfatizó el ministro de Trabajo.
Moroni fue uno de los funcionarios nacionales que respaldaron la decisión de extender hasta el 31 de octubre las restricciones para exportar carne vacuna, al considerar que la medida «está rindiendo sus frutos».
Desde el sector privado, el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) y la Mesa de las Carnes rechazaron la medida oficial y advirtieron las «implicancias negativas» que esta prórroga puede tener en la cadena.
Por su parte, la secretaria de Comercio Interior, Paula Español, dijo que la medida que limita las exportaciones al 50% de lo despachado el año pasado, sin que la cuota Hilton, 481, la de Estados Unidos y la carne kosher a Israel se vean afectadas, logró «contener el precio de la carne efectivamente en el mes de julio y se mantiene esta misma tendencia».
Además, la funcionaria destacó una recuperación en el consumo interno, ya que se «está viendo una recuperación en los kilos por cápita de carne que ya están superando los 52 kilos en este último mes».
Según Español, la medida «está rindiendo sus frutos» y, por ese motivo, se necesita que «se extienda un tiempo más» para, de esa forma, «seguir cuidando la mesa de los argentinos».
«Lo que es importante es que esta contención y leve reducción de precios se da en los distintos eslabones de la cadena desde la producción primaria a la media res, y luego eso se traduce en las góndolas», evaluó.
Respecto a la decisión de las entidades agropecuarias que integran la Mesa de Enlace de llevar a cabo «acciones» entre las cuales toma fuerza un cese de comercialización en rechazo a la medida oficial, Español opinó que «no están dadas las condiciones ni hay razón para tener este tipo de medidas».
En este sentido, los convocó para «trabajar en conjunto» con el objetivo de «mejorar la producción y la productividad del sector», y «cuidar que la carne llegue a todos y todas al precio que corresponde».
«Los convocamos a seguir trabajando en medidas estructurales importantes que nos permitan pensar en un Plan Ganadero y una solución estructural para el sector», añadió.