Los legisladores de Cambiemos no quieren firmar el informe final redactado por el secretario de la bicameral, porque responsabiliza al ministro por no advertir las averías de la nave. La interna del ejército.
Los legisladores de Cambiemos se niegan a firmar el informe final de la bicameral encargada de investigar las causas del hundimiento del submarino Ara San Juan, el 15 de noviembre de 2017, hallado un año más tarde en el fondo del mar por la compañía inglesa Ocean Infinity.
La resistencia se debe a que la redacción del documento, a cargo del secretario de la comisión Carlos Álvarez, no desliga de responsabilidad al ministro de Defensa Oscar Aguad por no haber advertido a tiempo la falla técnica que, según su descripción, ocasionó la implosión de la nave y la muerte inmediata de sus 44 tripulantes.
Álvarez tomó como base los testimonios de funcionarios, militares y del propio Aguad, quien en diciembre admitió que de haber sabido del ingreso de agua a la nave y del incendio en las baterías cuando se encontraba en zona de periscopio, no habría autorizado su inmersión en la profundidad, donde explotó unas horas más tarde.
Mientras la oposición lo considera al menos responsable secundario de tamaña negligencia por ser la última parte de la cadena de mando, previa al presidente Mauricio Macri, en Cambiemos creen que las culpas deben restringirse a las autoridades del ejército, luego separadas por el ministro.
«Marcelo Srur era el jefe del ejército y no informó al ministro, que estaba en Canadá y ni bien tomó conocimiento del hecho retornó al país», sostuvo ante LPO uno de los legisladores oficialistas que prepara un dictamen propio para el jueves 18 de julio, fecha elegida para presentar el informe final en el Salón de Pasos por el senador del PJ José Ojeda, presidente de la bicameral.
En su última visita a la comisión, en diciembre, Srur también se presentó como víctima de ocultamiento de información por parte de sus subordinados, pero sorprendió al admitir que el submarino no estaba preparado para navegar solo y el capitán Pedro Fernández presionó para zarpar y se salió con la suya. Una declaración similar realizó el último mes Aguad, cuando dijo que los tripulantes no estaban suficientemente entrenados.