Este martes, el dólar blue saltó $8 en una sola jornada y volvió a atravesar la barrera de los $300, ya que su precio se ubicó en los $302.
Desde junio de este año, cuando se registró una corrida cambiaria en el marco de la crisis ocasionada por la salida de Martín Guzmán del Ministerio de Economía, que no tocaba estos valores.
Si bien en la actualidad hay un cierto nerviosismo por el mercado de deuda en pesos y la evolución de las reservas del Banco Central de la República Argentina (BCRA) no es la mejor, el contexto político se ve más estable y el Gobierno venía logrando mantener una cierta calma en el mercado cambiario desde hace tiempo. Esas son señales de que la situación actual no es la de ese momento y todos los analistas buscan las razones para esta suba abrupta del blue.
Lejos de estar sorprendidos, muchos analistas lo ven como algo esperable. Uno de ellos es el director de CyT Asesores Económicos, Camilo Tiscornia, quien señala que «estamos en una situación económica bastante inestable en la que este tipo de movimientos son esperables». Pero ¿qué elementos lo están haciendo saltar justo en este momento?
1. Mala perspectiva de ingreso de dólares al BCRA
Tiscornia asegura que, «hasta el momento, el Gobierno logró contener los tipos de cambios paralelos con la tasa de política monetaria, que está por encima del 6% mensual», en línea con la inflación de los últimos meses. Explica que eso ayudó a que muchos inversores eligieran quedarse en pesos, pero asegura que eso se está dando vuelta en este momento. ¿Por qué?
En primer lugar, porque la perspectiva de ingreso de dólares a las reservas del BCRA no es buena en este momento debido a las condiciones climáticas. Se prevé que, por la sequía, en diciembre, que suele ser una época de liquidación de trigo en la que las reservas del Central suelen tener un cierto alivio, ingresará la mitad de los dólares de lo que estaba previsto para este año.
En consecuencia, el economista Federico Glustein sostiene que, «al haber cada vez menos reservas, dado que el BCRA ya perdió más de u$s900 millones en el mercado de cambios en lo que va del mes, no se ve un incremento del caudal de divisas norteamericanas y eso genera una presión adicional a la moneda».
Así, señala que esto se da en un contexto en el que «hay cada vez menos bienes finales importados por las múltiples restricciones, sumado a los problemas por temas climáticos que impactan en la oferta de commodities». Todo eso, según su visión, impulsa una mayor restricción de productos locales, demandando importaciones e incrementando la cotización de los paralelos como consecuencia.
2. La dinámica del canje de deuda
Por otro lado, Tiscornia menciona que se observa, en el último tiempo, una cierta dificultad en el proceso de colocación de deuda por parte del Tesoro. «En la última licitación, al Gobierno no le fue tan bien y entraron muchos organismos públicos en el proceso para salvar las necesidades de financiamiento», describe.
El problema es que, según su visión «eso genera muchas dudas de cómo le va a ir al Gobierno en las próximas licitaciones, de qué le va a pedir el mercado y de cómo va a financiar hacia adelante el déficit fiscal, que a esta altura del año suele ser muy alto».
Y es que, en esa dinámica de financiamiento y colocación de deuda, también influye, como apunta el economista de Epyca Consultores, Joel Lupieri, «la falta de claridad sobre el rumbo de la marcha económica de cara a 2023». Se trata de un año electoral en el que el Gobierno enfrenta el desafío de implementar un ajuste en línea con lo acordado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y eso hace más difícil la colocación en el mercado de bonos y títulos a largo plazo para el Gobierno.
3. Compra de dólar por turismo y cobertura
En ese contexto, Lupieri observa que, ante una perspectiva económica y política con mayor inestabilidad, «las personas comienzan a buscar cobertura y el dólar sigue siendo uno de los activos preferidos por los argentinos». No es ningún secreto que, ante la dificultad que existe para acceder a dólares oficiales por el cepo, muchos eligen ir al blue con ese objetivo.
Asimismo, considera que se está viendo, por otro lado, una anticipación de la demanda de divisas para turismo en verano. Así, no descarta que esta suba tenga un fuerte componente «estacional».
En igual sentido, Glustein sostiene que se vio un aumento de la demanda, que saltó de forma repentina, en gran parte por turismo, por un lado, donde las últimas compras reflejan en parte ese incremento de volumen.
4. Evolución de los dólares financieros
Glustein también señala que hubo movimientos fuertes del dólar MEP, que saltó por encima de los $300, a $304. «Por lo tanto, era esperable que el carry trade estuviera próximo a darse, con una diferencia tan alta de precio entre el blue y el dólar bolsa (el MEP) como la que se venía viendo».
Ocurre que, según apunta el economista de Anker, Martín Vauthier, los dólares financieros se fueron atrasando en términos reales. «Desde el pico que se registró en junio y julio hubo una caída importante y se mantuvo, pero los elementos macroeconómicos hacen que la brecha cambiaria aún se mantenga elevada», describe.