El divertido método de un perro para que lo lleven a la hamaca del parque durante sus paseos nocturnos

Arturo es un golden retriever que descubrió el placer de hamacarse y desde entonces no pierde la oportunidad de hacerlo.

lunes 30/12/2024 - 20:52
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Arturo es un perro raza golden retriever que ama hamacarse y logró una ingeniosa técnica para que lo lleven a los juegos del parque durante sus paseos nocturnos. Su humana compartió el divertido video en redes sociales, donde se viralizó rápidamente y generó ternura entre los usuarios.

En el clip se observa a la mascota en la plaza, un tanto inquieta. En un momento, le muerde suavemente la mano a la chica que lo acompaña como queriendo pedirle algo. Luego, empieza a tironearla, por lo que la joven se queja de dolor, pero al mismo tiempo se da cuenta de su deseo: “¡Ay Arturo! ¿Querés hamacarte?”, se escucha en el clip.

La chica accede a la petición de su perrito, se sienta en la hamaca y lo toma en brazos. Con un poco de dificultad pero con mucha actitud, logra ponérselo encima y empieza a balancearse en el juego de plaza. El animal se muestra muy a gusto con la experiencia y hasta se pone de lado para mayor relajación.

El golden disfruta de balancearse en la hamaca. (Foto: TikTok/@agustinamarzari)

La publicación de TikTok se llenó de expresiones de afecto de los usuarios que no podían creer como disfrutaba de la actividad: “Te amamos perrito que se quiere hamacar”, “te llevó de la mano, literalmente”, “me muero de amor”, “hay veces que pienso que estos seres solo vienen a demostrarnos lo simple que es la vida”, “ese bebé necesita una hamaca urgente”, fueron algunos de los comentarios.

Sin embargo, no es el único juego al que le gusta subirse. Los paseos son un momento de pura diversión para Arturo y cada vez que va al parque lo aprovecha al máximo. En otra ocasión se observa como le pide a la joven que lo lleve a otra de las atracciones del lugar y la chica nuevamente accede.

A Arturo le gusta subirse a los juegos de plaza. (Foto: TikTok/@agustinamarzari)

El golden se sube como puede a la calesita, ya que es demasiado grande para el espacio que normalmente está destino a los nenes, mientras que ella le da envión para ponerlo a girar. El perrito se queda tranquilo, sentado en el juego, mientras disfruta de su paseo por el parque.

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