Este domingo, el Centro de Promoción Barrial 30 de Octubre celebró sus 24 años al servicio de la comunidad con una jornada repleta de actividades lúdicas, recreativas y artísticas destinada a las distintas familias que forman parte de la institución.
Dependiente de la Secretaría de Desarrollo Humano y Familia, dicho CPB brinda actividades educativas y lúdicas para niños y niñas. En la actualidad, el espacio cuenta con múltiples propustas, tales como el Jardín Maternal, el Taller de Matemáticas, las Juegotecas Comunitarias y el programa FRE (Fortalecimiento a los Recorridos Educativos), como así también alberga al Grupo Sociorecreativo de Adultos Mayores “AMO”.
En ese marco, el secretario de Desarrollo y Familia, Ángel Rivas, valoró la tarea que llevan adelante el CPB y las instituciones del barrio, al tiempo que afirmó que “seguiremos avanzando fuertemente con los lineamientos que nos marca el intendente de acompañar y trabajar con cada una de las instituciones en el territorio”.
Por su parte, la subsecretaria, Julieta Miranda, recordó su paso como directora del CPB 30 de Octubre e hizo hincapié en la importancia de “pensar el territorio como dispositivo a la hora de planificar, ejecutar y evaluar políticas públicas en beneficio de las familias”.
La directora actual de la institución, Corina Cifuentes, celebró la labor efectuada durante 24 años e hizo énfasis en “continuar trabajando y redoblando los esfuerzos para así seguir tejiendo lazos fuertes con la comunidad y creando sentido de pertenencia”.
“Actualmente formamos parte de las 12 organizaciones comunitarias dependientes de la Secretaria de Desarrollo Humano y Familia, donde el principal basamento es la perspectiva de protección integral de la niñez, adolescencia y familia; por ello trabajamos desde la participación ciudadana para el fortalecimiento de las capacidades de las personas y grupos”, sostuvo la directora.
24 años de historia en la ciudad
Cabe recordar, que el CPB 30 de Octubre fue inaugurado el 22 de septiembre del 2000 con el objetivo de dar respuesta a las necesidades de las niñeces, adolescencias y sus familias. A lo largo de los años, la entidad se caracterizó por ser un servicio abierto a la comunidad, trabajando y acompañando a las familias antes diversas situaciones de vulnerabilidad, desde el refuerzo alimentario y el fortalecimiento familiar. A su vez, trabaja conjuntamente con la red comunitaria de la que forman parte las diversas instituciones del barrio.