Las ventas acumulan una contracción de 7,6% en lo que va del año, según el último informe de la consultora Scentia. Un dato similar, algo peor, había mostrado Nielsen días atrás, con una caída de 11,6%.
Si en algún momento las consultoras esperaban que en el segundo semestre comenzara una leve recuperación del consumo masivo producto de las bajas bases de comparación del año pasado, la desaceleración de la inflación y las paritarias, los datos de julio finalmente confirmaron que las expectativas previas eran demasiado optimistas.
Las ventas del séptimo mes del año en supermercados y autoservicios se derrumbaron 10% respecto del mismo período del año pasado y acumulan una contracción de 7,6% en lo que va del año, según el último informe de la consultora Scentia. Un dato similar, algo peor, había mostrado Nielsen días atrás, con una caída de 11,6% pero sólo en el canal moderno.
Los datos generan alarma, ya que pertenecen al mes previo a las PASO y, por ende, a la devaluación de 18,7%. Con la suba del dólar y el impacto que tuvo en los precios, en agosto el escenario podría ser incluso peor, aunque podría atenuarse por las medidas adoptadas por el Gobierno para morigerar este golpe, especialmente, la quita del IVA a los alimentos de la canasta básica.