Después que el diario Jornada publicara el lapidario informe del Banco Central sobre el Banco Chubut, donde fallan los controles calificados por el organismo nacional de “inadecuados”. La respuesta de las autoridades del Banco del Chubut no se hicieron esperar y decidieron cortarle la publicidad al matutino «por razones presupuestarias».
A continuación la tradicional columna dominical del diario Jornada donde expone las notas enviadas anunciando el corte de la pauta a Canal 3 y FM Tiempo. Ya se la habían cortado al matutino.
«Nos dirigimos a ustedes con el fin de informarles que por expresas órdenes de nuestra superioridad y motivos presupuestarios, nuestro banco ha resuelto dar de baja la pauta publicitaría con su emisora a partir de la fecha y hasta nuevo aviso”.
El escueto texto, idéntico en su redacción fue enviado por autoridades menores del Banco del Chubut al Frupo Jornada. De esta manera, la entidad terminó de lapidar al grupo en lo que hace a su relación comercial ya que desde hacía un tiempo, había decidido hacer lo mismo con el diario, cabecera periodística del grupo.
Por supuesto que en esta decisión nada tienen que ver los empleados bancarios que firman la nota, Marcelo Adrián Olivera y Hugo Ernesto Femia. Como bien lo dicen, responden a orden de la superioridad.
Al igual que en el ejército, los empleados no hicieron más que traducir lo que le ordenaron el presidente de la entidad Carlos García Lorea y la blonda directora Silvia Giusti, aunque parezca mentira, ex senadora de la Nación.
Este ataque artero al grupo Jornada es también un ataque a la libertad de expresión. La excusa de los “motivos presupuestarios” era utilizada con absoluta impunidad por los gobiernos de facto cuando algún medio osaba contradecirlos. Molestos por informaciones fidedignas publicadas por medios que integran el grupo (en especial el diario) Lorea y Giusti intentan utilizar dinero que no es de ellos para extorsionar a un grupo periodístico.
Pero se equivocaron de cliente. No ha conocido Jornada de cortes de pautas publicitarias a otros medios de la provincia “por razones presupuestarias”. Se entiende que si algún organismo pasa por un mal momento económico recorta a todos los medios por igual.
De todas maneras parecería que García Lorea y Giusti ingresan en una contradicción que tal vez no sepan ni puedan explicar. ¿Cómo es que el Banco del Chubut, que está en un lugar de privilegio en cuanto a su situación financiera deba recortar la publicidad de un medio por “motivos presupuestarios”?. O le mienten a Jornada o le mienten a la gente. Todo parece indicar que el presidente García Lorea no tiene lo que hay que tener y poner para arremeter contra este grupo. Se escuda tras motivos banales y también abusa de la confianza que desde el Gobierno le otorgan.
García Lorea no es de esta provincia. Ha venido simplemente a “hacer la plancha” en una entidad que se ha consolidado merced al trabajo de su antecesor y a las fuertes decisiones políticas tomadas por el Gobierno. Por otro lado es difícil que García Lorea (de un paso poco recordable por la Casa de Chubut en Buenos Aires) conozca la realidad tanto del Banco como de la provincia, ya que pasa más tiempo en los aviones que en su despacho de Rawson. Vive en Buenos Aires, lugar donde algún día se irá definitivamente.
Este manejo discriminatorio es absolutamente injusto, anticonstitucional, arbitrario y de facto. Los gobiernos de una dictadura intentaban silenciar a los medios de prensa.
Era, claro, porque tenían mucho que esconder. ¿Será este el motivo verdadero de la decisión del presidente del Banco y de su directora más obediente?.
