El juez a cargo de la herramienta tecnológica sugirió que el árbitro principal revise la acción. Durante más de tres minutos, analizaron la maniobra: “Andrés, escuchame, primero llega el arquero y posiciona el pie. El toque del delantero es inevitable con el arquero”.
Iban apenas ocho minutos de juego en Lima y el partido todavía estaba 0-0. Christian Cueva picó, corrió con campo libre contra Franco Armani y cuando intentó gambetearlo cayó en el área. Todas las miradas se posicionaron sobre el árbitro principal, Wilmar Roldán, quien no cobró nada en ese momento. Sin embargo, los ojos estaban centrados en realidad en la cabina del VAR que analizaba minuciosamente la jugada.
Esa maniobra que se revisó durante más de tres minutos finalmente no fue sancionada por el juez, pero en las últimas horas se conoció el diálogo que mantuvo con sus colegas a cargo de la herramienta tecnológica y el debate que mantuvieron para resolver la situación. “Posible penal”, anunció el colombiano Andrés Rojas cuando cayó Cueva en el área. Una advertencia habitual para estas maniobras dudosas que deben visualizar.
Rápidamente, Roldán planteó su mirada: “Para mí es acción del juego, lo toma corriendo y es inevitable el choque”. Desde la cabina le pidieron: “Wilmar por favor no reanudes”.
Durante varios segundos, intercambiaron miradas. “Toca el balón y después lo toma corriendo y se chocan. El choque es inevitable. No veo una acción del pie de Armani para evitar el paso del juego”, argumentó Roldán. “Hay una infracción acá”, le dijo Rojas. “Haga la señal Wilmar”, le reclamó el Asistente del VAR, Jhon Ospina, para pedirle que advierta que iría a ver la repetición.
Pero a pesar de eso, todavía quedaban varios segundos hasta que Roldán se acercaría a la pantalla. Durante ese tiempo, analizaron si no existió un fuera de juego previo y también visualizaron el APP, Atacking Possession Phase (fase de ataque con posesión del balón). Este último concepto fue por el que se terminó anulando el gol de Lionel Messi contra Paraguay en el duelo previo a la presentación ante Perú.
A más de un minuto y medio de desarrollarse la acción polémica, el VAR finalmente citó a Roldán frente a la pantalla. Previamente, visualizaron desde distintos ángulos la maniobra para discernir si había sido falta o no. “Hay una pierna ahí”, advirtió el VAR. “En la carrera choca, el contacto está”, agregó a su argumentación.
“Wilmar te recomiendo OFR (Revisión sobre el terreno). Potencial penal del portero sobre el atacante. Haz la señal”, le anunció formalmente el juez a cargo de la herramienta tecnológica mientras elegía la imagen que le mostraría a Roldán.
A partir de ese momento, se inició un intercambio de miradas entre ambos árbitros. “Ya Andrés, cuenteme”, le pidió Wilmar. “Punto de contacto: te muestro el pie derecho del atacante con la pierna del guardameta. Te hago looping en este ángulo de la parte izquierda”, le explicó. “Vamos a mirar quién llega primero”, avisó Roldán. Y le pidió: “Más atrás porque ahí veo que el pie de Armani está posicionado ya en distancia”.
“Mira, juega el balón y en la carrera lo pone. Está el contacto acá. ¿Este ángulo te parece bien?”, le detalló Rojas desde la cabina. “Andrés, dame otro ángulo”, exigió la autoridad principal. Mientras le mostraban la cámara desde el sector izquierdo, Roldán anunció su determinación: “Andrés, escuchame, primero llega el arquero y posiciona el pie. No hay un movimiento. El toque del delantero es inevitable con el arquero”.
“Perfecto Wilmar”, le dijeron. “Para mí no es penal. Mantengo mi decisión”, concluyó el debate Roldán. “Correcto, seguimos. Reanudamos”, finalizaron desde la cabina.
Finalmente, el juego continuó y diez minutos más tarde Nicolás González abrió la cuenta para Argentina. A los 28, Lautaro Martínez señaló el segundo para los de Lionel Scaloni, poniendo el resultado en un marcador que no volvería a moverse.
