Acusan que el gigante estadounidense violó las leyes antimonopolio al comprar Instagram y WhatsApp, para eliminarlos como competidores.
Las autoridades estadounidenses de la competencia (FTC) presentaron una nueva querella contra Facebook el miércoles pasado, en la que acusan al gigante de las redes sociales de abuso de posición dominante, luego de una primera tentativa judicial rechazada por un magistrado en junio.
Se trata de una demanda inicial por prácticas contrarias a la libre competencia, interpuesta en diciembre, que amenazaba al grupo californiano con tener que separarse de Instagram y WhatsApp, pero el juez James Boeasberg estimó que faltaban elementos «concretos sobre el poder real de Facebook».
En este sentido, Boasberg le había dado a la FTC 30 días para corregir el error y volver a presentar, y la comisión ganó una extensión hasta el 19 de agosto.
La demanda es parte de un amplio esfuerzo de los legisladores y los encargados de hacer cumplir la competencia para controlar el poder de las mayores empresas tecnológicas de Estados Unidos.
De hecho, el Departamento de Justicia y los fiscales generales estatales de todo el país tienen múltiples demandas pendientes contra Google, mientras que los demócratas y republicanos en el Capitolio están impulsando una serie de proyectos de ley que impondrían nuevas restricciones sobre la forma en que las empresas hacen negocios.
Los defensores de la reforma dicen que las decisiones de los tribunales durante décadas permitió que las empresas dominantes se involucren en tácticas anticompetitivas y que el Congreso debe otorgar a los encargados de hacer cumplir la ley una nueva autoridad.
En contracara la política disuadió a las aplicaciones de ofrecer características que podrían competir con Facebook y evitó que aplicaciones prometedoras se convirtieran en amenazas.
En tanto las acciones de la compañía estadounidense revirtieron una ganancia anterior, cayendo menos del 1% a u$s355,28 a las 11.34 en Nueva York, mientras la acción subió alrededor de un 30% este año.
