La joven de 30 años pereció este lunes tras luchar con una grave enfermedad del corazón, por la cual esperaba un trasplante de dicho órgano que nunca llegó.
Mariana Ditzel perdió la vida a sus 30 años luego de dar pelea por varias semanas contra una miocardiopatía dilatada no compactada.
Se encontraba internada en Buenos Aires, donde esperaba un trasplante de corazón estando primera en la lista de urgencia del INCUCAI, pero el donante nunca apareció pese a las campañas masivas para conseguirlo.
Su familia y amigos la despiden en redes sociales tras enterarse de la desgarradora noticia. “Hasta siempre Marianita!!! La peleaste como una verdadera guerrera!!! Nos dejaste una enseñanza tremenda a todos, gracias de todo corazón amiga, te recordaremos siempre con tu sonrisa tan linda, nuestro ángel, andá en paz a los brazos de Dios”, escribió Ángeles, una de las amigas de Marianita.
Su descargó continuó con un agradecimiento para quienes colaboraron con la causa en estos 24 días de lucha que llevó adelante valientemente la joven comodorense. “Sin ustedes esto nos hubiera sido mucho más difícil”, dijo la amiga.
Ángeles se tomó el tiempo para agradecer a “los medios que siempre estuvieron a disposición” y “a todos, de lo más profundo de mi ser”.
Hizo mención de la mejor amiga de Marianita, que fue “la mejor amiga que Marianita pudo tener en esta tierra, fuiste un ejemplo y estoy orgullosa de ser tu amiga, yo me quedaré siempre a tu lado mi vida!!! Te amo tanto!!!”.
Por último, envió sus “condolencias a toda su familia en un momento de tanto dolor. Hasta siempre amiga, seguiremos sosteniendo tus manos hasta la eternidad. Volá alto mi niña!!!”.
Cerró su posteo con un mensaje que se replicó miles de veces a lo largo y ancho de todo el país, y que no deberá dejar de hacerse oír: “Los órganos no van al cielo”.