Los especialistas afirman que el autoplacer es una práctica saludable y necesaria en la vida de las personas. Además, sostienen que no hay vínculo entre esta práctica y la inmadurez o la soledad.
Cada 7 de mayo, desde 1995, se celebra el Día Mundial de la Masturbación. La fecha fue instaurada por un fabricante de juguetes sexuales que quiso homenajear a la pediatra Joycelin Elders. Esta médica dijo -según publica TN– en un discurso ante la ONU que “el autoplacer y el descubrimiento sexual personal es algo propio de la sexualidad humana que debería ser enseñado en las escuelas”.
En la antigüedad, la masturbación estaba asociada a lo prohibido, casi todo el mundo lo escondía. Pero especialistas en Sexología, afirman que esta práctica es sana, natural y tiene muchos beneficios, tanto físicos como psicológicos.
La sexóloga y psicóloga del Hospital de Clínicas, Viviana Wapñarsky (M.N. 24.433), aclaró que la »masturbación no hace daño» y que tampoco »interfiere en las relaciones con otras personas».
Además, señaló que una de las ventajas de la masturbación es que ayuda a liberar endorfinas producto de la satisfacción del orgasmo: »Junto con la oxitocina y la vasopresina, son componentes químicos asociados con el sueño. También aporta dopamina, que está asociada con un fuerte sentimiento de bienestar».
En promedio, una persona se masturba cercano a tres veces por semana, aunque varía entre hombres y mujeres.
En el estudio realizado por la agencia Appinio Market Research y Behavioral Sciencie Lab, reveló que los hombres se masturban 156 veces al año, lo que se traduce a tres veces por semana.
Por otra parte, las mujeres se masturban entre 3 y 5 veces por semana, según el estudio realizado por la National Survey of Sexual Health and Behavior (NSSHB) de la Universidad de Indiana, Estadios Unidos.
Si bien existen muchos mitos sobre esta práctica, los estudios señalan que existen dos efectos secundarios que pueden aparecer en los hombres:
Pérdida de sensibilidad sexual: si un hombre se masturba todos los días de una manera muy agresiva pueden experimentar una pérdida de sensibilidad en el pene.
Eyaculación precoz: masturbarse todos los días de una manera rápida puede provocar que el órgano reproductor del hombre se acostumbre a esa masturbación.
“La masturbación no hace daño. Tampoco interfiere en las relaciones con otras personas, son dos cosas paralelas”, aclaró la sexóloga y psicóloga del Hospital de Clínicas, Viviana Wapñarsky (M.N. 24.433). “Cada uno se puede masturbar como quiere, acá no hay reglas. Sirve para darnos pistas y enseñarnos qué es lo que nos gusta, cómo excitarnos y que es lo que dispara nuestros orgasmos”, señaló al respecto.
Por su parte, Walter Ghedin (M.N. 74.794), psiquiatra y sexólogo, dijo que la masturbación “es la primera de las prácticas sexuales que aparece en el desarrollo de varones y mujeres y tiene como función el descubrimiento del cuerpo erógeno, la activación de fantasías sexuales y favorecer la aparición de la respuesta orgásmica”.
En ese sentido, el especialista precisó que se trata de una conducta íntima y su placer está ligado al acto privado.
“El placer que brinda la masturbación no es mejor ni peor, sino que es diferente en relación a tener sexo con otra persona. Y esta diferencia está dada por la conexión más íntima con uno mismo: se reduce la ansiedad y no existe la presión de estar sincronizados con el otro para llegar al orgasmo. La conexión con las fantasías crea un mundo imaginario que se puede modificar a gusto y piaccere”.
En lo que refiere a la masturbación femenina, Ghedin explicó: “En las mujeres es una práctica que ayuda a vencer los pudores y los miedos respecto al propio cuerpo”. Un aspecto que beneficia a las mujeres es que favorece la lubricación y reduce la sequedad vaginal. “Siempre es bueno explorarse, aceptarse, darse el tiempo, buscar fantasías, recuerdos de alguna pareja, encontrar qué cosas nos despiertan el deseo”, sugirió por su parte Wapñarsky.
En tanto, Ghedin precisó que la testosterona es una hormona que tiene su ciclo diario de secreción: baja a la mañana y se incrementa a la tarde. “Por lo tanto, las actividades físicas y sexuales que se realicen en esa franja horaria (tarde/noche), van a contar con mayor cantidad de testosterona en sangre».
Y agregó: »Igualmente, esta hormona se incrementa levemente cuando se tienen fantasías sexuales, durante la masturbación o las relaciones sexuales. Hay estudios que revelan que la eyaculación no desciende los niveles de testosterona como podría pensarse. Se ha demostrado que la abstinencia de sexo durante una semana incrementa notablemente los niveles de la hormona”.
Por último, el sexólogo reveló que en los deportes de competición se suma el estrés que provoca el entrenamiento y participar de eventos deportivos.
“La ansiedad puede provocar disfunciones en la erección y en la eyaculación. Por tal motivo se sugiere que el deportista no tenga abstinencia absoluta, sino que tenga alguna actividad sexual previa a la competencia deportiva. Aquellos deportistas que dicen masturbarse a diario no obtendrían beneficios por un incremento notorio de la testosterona, pero sí por la disminución de la ansiedad que les provoca competir”, concluyó.