Sucedió esta mañana en las calles del barrio San Cayetano. El taxista conducía en presunto estado de ebriedad, golpeó a un efectivo con el espejo retrovisor y fue detenido tras una persecución.
Según informa Consello Patagónico el conductor del coche taxi circulaba a las 8:15 horas en presunto estado de ebriedad y realizaba maniobras peligrosas sobre la avenida Polonia.
La policía de la Seccional Sexta intentó detenerlo en el semáforo de Polonia y O’ Donell, pero el automovilista no acató las ordenes y golpeó con el espejo retrovisor del acompañante a un efectivo.
Fue perseguido y detenido sobre Polonia y calle Mahuida. El personal municipal de Tránsito efectuó el test de alcoholemia que arrojó 2,1 gramos de alcohol por litro de sangre.
El hombre identificado por la policía y fue apresado. Quedó a disposición de la Justicia por el delito de atentado a la autoridad.