La protagonista observó que el sospechoso «agarraba con demasiada fuerza al niño de su mano y le decía que camine rápido».
Una mujer salvó a un nene de siete años de ser secuestrado en una plaza mendocina. Al alertar sobre esta situación a tiempo, persiguió al sospechoso, y logró rescatar al menor. El hecho ocurrió el miércoles en las horas del mediodía en la localidad de Tunuyán, en la provincia de Mendoza.
Paula Morales miraba por la ventana de su cocina, cuando se percató de una situación que le resultó extraña. La mujer contó a los medios locales que «el hombre agarraba con demasiada fuerza al niño de su mano y le decía que camine más rápido». Este detalle la alarmó, ya que ella conocía tanto al niño como al hombre y sabía que no existía relación previa entre ellos.
Cuando ambos se alejaron, decidió seguirlos y comenzó a gritar que dejara al niño. La mujer, que estaba con su hijo de cuatro años, fue junto a él en su vehículo y avanzó hasta una finca donde visualizó a lo lejos que el hombre llevaba al nene secuestrado a pie.
Cuando la mujer interceptó al encargado del predio, este le dijo que el hombre con el nene secuestrado había dicho que “era familiar y que buscaban un perrito perdido”, pero al escuchar el rápido relato de Paula, el empleado se alertó y le permitió ingresar con la camioneta por el lugar.
Morales y el encargado emprendieron la búsqueda por el campo hasta que visualizaron al hombre con el niño que cruzaba a otra finca vecina. Cuando los tuvieron cerca, el hombre les gritó que eran familiares y que buscaban a un perrito, pero la mujer no le creyó y lo amenazó con llamar a la Policía si no soltaba al nene.
La mujer se mantuvo firme y le pidió regresar nuevamente hacia el lugar donde lo había secuestrado. A lo que el hombre accedió aunque no soltaba al menor y seguía sosteniendo su versión que estaba al cuidado del menor. La mujer los siguió de cerca en su camioneta hasta que estuvieron cerca del domicilio del niño y constató que lo dejó ahí.
Minutos después, la heroína de esta historia buscó a la madre del niño, quien desmintió toda la historia de este hombre, y sostuvo que ella daba por sentado que su hijo estaba jugando en la plaza.
Posteriormente, la mujer se acercó hasta la comisaría local para realizar la denuncia de lo sucedido y se abrió una investigación.
