Por miedo a la inseguridad en Paraguay, un padre de 72 años espera todas las noches desde hace tres años que su hija se baje del colectivo en la misma parada para evitar que le pueda suceder algo malo.
Félix Cárdenas tiene 72 años y es el papá de Belén, su hija de 22 años que regresa muy tarde a su casa y él, sin ningún problema y con todo el amor del mundo, aguarda por la llegada de su hija.
El adulto mayor comienza su caminata de muchas cuadras para poder llegar a la garita de colectivos que es muy oscura y no tan transitada de noche.
En una publicación de Twitter, Belén Cárdenas, de la ciudad de Ñemby, Paraguay, comentó que a pesar de no llegar a cualquier hora a su casa, su papá está siempre en el mismo lugar aguardando por ella para evitar que le suceda algo malo.
«Viejito no quiero que nunca me faltes te amo muchísimo», escribió la joven de 22 en un tuit, con más que una muestra de cariño hacia su padre. El posteo lo subió el 22 de febrero y consiguió más de 25 mil «me gusta».
«Iba siempre a buscarme, pero luego se fue haciendo la idea de que ya no estaba en el colegio, que yo tenía que aprender a soltarme más y a andar por mi cuenta. Pero siempre está presente en las paradas», le dijo al medio local Extra de Paraguay, agregando que desde el 2019 que tiene el noble gesto con su hija.
Según agregó el Diario Clarín, Belén contó que siente una inmensa felicidad cuando baja del bus y ve allí a su padre esperándola. «Me siento segura con él», afirma.