Se perdió contacto a la altura del Caribe. Piden ayuda a la embajada argentina en México para localizar al barco. Hasta el momento no obtuvieron respuesta de las autoridades locales.
Desde hace 4 días la familia de Renzo Spasiano, de 20 años, perdió contacto con el joven. Había ido como voluntario en un yate que regresaba de Haití, a donde viajaron para brindar ayuda humanitaria, a México. Según informaron a TN.com.ar, el buque está tripulado por cuatro personas: dos de ciudadanía argentina, un cubano y un mexicano.
“Necesitamos que la embajada argentina en México solicite al SEMAR (Seguridad marítima) comenzar con la búsqueda del M.O.I Guadalupe”, pidieron los familiares. Según informaron, de inmediato se pusieron en contacto con la comunidad de Playa del Carmen, pero por el momento no obtuvieron respuesta de las autoridades.
Spasiano viajaba junto a tres personas más: Denis Manuel Fernández Días, cubano de 46 años, Carlos Juárez, también argentino, de 43 años y Martín Vega Argaez, mexicano de 44.
De acuerdo con el itinerario, el bardo debió haber llegado el 29 d septiembre a Cozumel, México. La última comunicación tuvo lugar el día anterior, cerca de las 11 de la mañana, hora local. En cuanto a la ubicación, la última se detectó a las 13:25 en la zona de Yucatán.
“Llevaron remedios y comida. Es un yate de 83 pies. Salieron de Quintana Roo, sin ningún problema”, contó a TN este sábado Luis Spasiano, padre de Renzo. “Cargaron combustible, alimentos e iniciaron el regreso. Se reabastecieron en el puerto de Jamaica, rumbo a México”, relató.
Según describió el hombre, la embarcación contaba con todas las condiciones para resolver situaciones en caso de emergencias. “Llevaban un teléfono satelital y un equipo de posicionamiento global que emite señales cada 20 minutos, con la ubicación. Por eso se podía ir monitoreando la ruta”, explicó. “Tuvieron una comunicación con un capitán que se encuentra en Miami y dijeron que el tiempo estaba bien, sin tormentas ni viento, el mar estaba tranquilo. Todo en condiciones óptimas, pero a los 20 minutos se corta el posicionador y la comunicación”, agregó Spasiano.
Como el yate nunca llegó , las autoridades mexicanas activaron el protocolo correspondiente para estas situaciones pero implicaba esperar 24 horas más. “Se espera un tiempo por si habían tenido algún problema con alguno de los dos motores del yate. Pero por la desesperación nosotros contratamos un avión de manera particular para iniciar la búsqueda”, indicó Spasiano.
“Pero no hay rastros, volaron tres veces. Yo soy mecánico de barcos y analicé los peores escenarios. Si se hubiese hundido, tendrían que haber visto restos o alguna parte. Lo mismo si se hubiese incendiado”, describió. “Además llevaban una balsa salvavidas y un bote semi rígido con motor y combustible suficiente. El barco estaba apto y todas las condiciones dadas, pero no sabemos qué pasó. Necesitamos que la marina active el protocolo de búsqueda y rescate”, pidió.
Fuente: TN
