Una respuesta insólita recibió la policía de Tucumán durante la madrugada del domingo, cuando realizó un operativo para desactivar una fiesta clandestina en un country de Yerba Buena.
Al arribar al lugar, alertados por una denuncia y cerca de las 2, las fuerzas de seguridad detectaron una reunión con al menos 70 personas, algo absolutamente prohibido por las disposiciones del Comité Operativo de Emergencia (COE) local para controlar la pandemia de coronavirus.
Al momento de ser interpelados, los dueños de la propiedad brindaron su increíble declaración. Según ellos, habían invitado solo a cinco amigas de su hija, que cumplía años, para una pijamada.
Para justificar la presencia de siete decenas más de personas en el domicilio, aseguraron que el resto de los presentes había ingresado al country saltando las rejas traseras del predio.
Según declaraciones del jefe de la Unidad Regional Norte, Comisario Mayor Damián Soria, cerca de las 2 de la madrugada, personal de la comisaría de esa ciudad que realizaba recorridos preventivos, recibió un llamado del Sistema de Monitoreo 911, que alertaba que en el country Los Álamos se estaba desarrollando una fiesta clandestina.
Una vez en el lugar, y desarticulada la reunión en el lote 41 del predio, la policía realizó un rastrillaje para terminar de desalojar del country a todos los adolescentes sin residencia en el mismo.
Luego, se dio intervención a la Unidad Fiscal de Decisión Temprana, que no dispuso medidas privativas. Todos los presentes aseguraron estar en el lugar por una fiesta de cumpleaños, que debe haber sido la pijamada más grande de la historia de la provincia.
Otros operativos en Tucumán
La enorme «pijamada» no fue la única fiesta clandestina que desactivó la policía de Tucumán en el último fin de semana.
En el barrio Pinar de Roca, de El Colmenar, las fuerzas de seguridad irrumpieron en una celebración con más de 250 personas. El operativo terminó con resistencia y piedrazos por parte de varios de los asistentes.
Durante la madrugada del sábado, en Famaillá, fueron dos las fiestas que se detuvieron por la fuerza. En una, había 150 personas, y en la otra 100. A todos los presentes se los notificó sobre la infracción al artículo 205 del Código Penal.
Fuente: clarín