Guillermo Almirón, quien acompaña a Ana Clara Romero en la fórmula para conducir el municipio local, se refirió a lo que será su rol en caso de acceder al cargo electivo al que se postula a los fines de poder comenzar a articular las acciones que se precisen.
“Ana clara tiene la posibilidad de representar una oxigenación, creo que el modelo político no puede ser “tomala vos, pasámela a mí y ahora sigue este como si fuera un circuito cerrado y no generar posibilidades, y molesta a veces, inclusive se los nota molestos cuando hablan de la posibilidad del cambio, eso no nos puede pasar como comunidad”, disparó.
Al aire por Radiocracia, enfatizó que “eso no debería ser parte del discurso del oficialismo, y lo es. Tiene que haber posibilidades de recambio, de oxigenación, y Ana Clara representa eso, tiene las características, hay cosas que se tienen y no se tienen. En este momento es la persona que puede llevar adelante esa transformación”.
En ese marco, detalló: “no voy a tirar números al boleo, pero más o menos un 70 o 75% de la población plantea un cambio, está en la punta de la lengua de cambiar las cosas y ella es la que en este momento concentra porque además tiene garra, espíritu, ideas, empuje, todas las condiciones necesarias para representar esa situación y creo que los comodorenses la van a acompañar”.
Por otra parte, se refirió al plano de obras y cómo concretarlas: “yo no sé si habría que preguntarle si lo ven o no lo ven (a los actuales gobernantes), pero evidentemente pasa al no abrir el espacio de la discusión política, por eso planteamos el modelo del Consejo Económico y Social como permanente, cambiar un modelo de gestión”, indicó Almirón.
Y agregó que “el modelo de gestión es el de que voto a alguien cada cuatro años, le doy un cheque en blanco y hace lo que él piensa que tiene que hacer sin convocar prácticamente a nadie, eso es imposible de llevar a cabo para nadie. Puede hacer autocrítica como votante, también tendría que presionar un poco para que las cosas se hagan, pero no hay dónde hacerlo. Es justamente el que accede al Gobierno el que tiene que convocar, porque aparte es una necesidad hacerlo para legitimar las decisiones”.
“Esto pasa porque hay también mucho hartazgo como hemos escuchado en todo este tiempo, cansancio, como que todo da lo mismo. Ahora si vos convocás, haces un diagnóstico compartido, planteás los problemas, estableces un orden de prioridades y buscás que la comunidad te acompañe, te va a acompañar en el proceso, que es el sentido contrario a lo que estamos viendo”, determinó. Finalmente, manifestó que “para el caso de conducir políticamente una ciudad, vos podés tener más o menos recursos, hacer más o menos obras, pero para cambiarle el destino, el horizonte, hay que poner a una comunidad detrás. Esa es la tarea de la política, y eso es lo que hoy está como muy flaco, muy raquítico de ser convocado”.