El adiestramiento hará que lo disfrutemos más y mejor, evitando fallas en la transmisión del mensaje. Cómo ayudarlo a que entienda las pautas establecidas en el hogar.
No se trata de transformar a un perro de casa de familia en un acróbata o en un can de espectáculo, sino de ayudarlo a aprender los mecanismos básicos de contacto y comunicación en beneficio de la relación.
Desde que el perro llega al hogar, hay que establecer reglas y tratar de que entienda cuáles son las pautas establecidas.
Nada de esto es posible sin conocer el lenguaje canino y sus códigos.
Cuando aparecen problemas en la convivencia casi siempre se deben a planteos educativos erróneos y al desconocimiento de las necesidades del animal.
Si un perro no acata órdenes básicas, habrá tensiones en la casa derivadas de problemas de convivencia con el animal.
Cuando aparecen problemas en la convivencia, casi siempre se deben a planteos educativos erróneos (Shutterstock)
Regla N° 1 – Las tres C
Las órdenes deben ser claras, cortas y concisas (regla de las tres C).
No agregue palabras innecesarias a la orden.
Todas las palabras que se agreguen serán entendidas como modificaciones no aprendidas y lo más probable es que la orden no se cumpla.
Regla N° 2 – Las cinco P
Tenga paciencia: los perros tienen sus tiempos, no se ofusque ni se altere.
Sea paulatino: no avance con rapidez. Todo a su tiempo.
Tenga persistencia: los perros necesitan repeticiones.
Otorgue premios: Los aciertos pueden ser premiados con palabras dichas con un franco tono de aliento, o con caricias. También es posible dar un premio alimenticio que será exclusivo para ese momento y nunca integrará la dieta habitual del animal.
El adiestramiento debe ser periódico: recuerde que los perros son rituales y es bueno construir con la sesión de adiestramiento un ritual, que con la repetición de lugar y circunstancia se convierta en una rutina y luego en un hábito.
Regla N° 3 – No solo palabras, agregue gestos
Los perros escuchan las palabras pero atienden a lo gestual.
Toda orden debe ir acompañada de un gesto asociado, único y repetido cada vez.
Sea paulatino: no avance con rapidez (Shutterstock)
Regla N° 4 – Sea constante
Diga siempre lo mismo y en el mismo tono de la voz.
Todos los días la práctica debe ser en un mismo lugar, tranquilo y aislado
Regla N° 5 – Termine lo empezado
Si da una orden, termine con el cumplimiento correcto de ella.
Nunca cambie a mitad de camino, pues lo que logrará es confundir al animal.
No lo elogie o estimule antes de tiempo.
Regla N° 6 – La clase es la clase y el recreo es el recreo
Cuando comience a adiestrar al perro, piense que ese tiempo es como un tiempo de clase.
Cuando los chicos están en escuela, hay tiempo de clase, tiempo de aprender y también hay receso para jugar.
Lo mismo debe ocurrir con su perro.
Regla N° 7 – Actúe siempre igual
Las órdenes deben ser las mismas a toda hora y dichas por cualquier miembro del entorno.
Esto es algo que muchos propietarios pasan por alto y es una de las causas del fracaso.
Nunca cambie a mitad de camino (Shutterstock)
Regla N° 8 – Lo bueno, si es breve es mejor
Los perros, y especialmente los cachorros, no poseen capacidad de atención por períodos largos.
Es preferible 10 o 15 minutos bien aprovechados todos los días que una hora desperdiciada de vez en cuando.
Regla N° 9 – Termine con un éxito
Es importante que el perro goce de estas sesiones. Si no, vamos derecho al fracaso.
Si no aprende una prueba nueva vuelva a la anterior, prémielo cuando la cumple y termine por hoy.
A nadie le gusta volver al lugar en el que se fracasa. A su perro tampoco.
Regla N° 10 – Esté tranquilo
Permanezca en calma y bajo control. Estamos hablando de usted y no del perro. El entrenamiento debe ser agradable para ambos. Si está nervioso o enojado, el perro o captará y no pensará en la tarea a cumplir.
Nunca hay que castigar al perro con violencia. La mano no pega, sólo acaricia (Foto: Shutterstock)
Regla N° 11 – Olvídese del “¿Quién hizo esto?”
Jamás reprenda a su animal por algo por lo que no lo haya pescado in fraganti.
Reconocerá su tono de enojo, pero no el exacto significado de su mensaje. No es posible relacionar culpas del pasado con castigos o reprimendas de hoy.
Regla N° 12 – No castigue. La mano no pega, solo acaricia
Los errores solo deben ser castigados con un no rotundo y tajante, pero nunca pegándole al perro.
Nunca castigue físicamente a su animal. Además de ser una crueldad, no le dará ningún resultado.
Regla N° 13 – Recuerde que el perro es perro
Es otra especie con otros códigos, otro idioma y otra organización social.
Fuente: infobae.com