A poco más de 24 horas para el cierre de listas para las candidaturas a la presidencia del PJ, la interna peronista está más vigente que nunca. El acto del gobernador bonaerense, Axel Kicillof, realizado ayer, no alcanzó para calmar las aguas. Incluso la reacción fue peor.
Si bien el mandatario reivindicó a la expresidenta Cristina Kirchner, no fue tajante en su respaldo a sus intenciones de conducir el Partido Justicialista.
Y la respuesta de CFK no tardó en llegar. “No estamos eligiendo entre San Martín y Belgrano. Me hace ruido y me provoca dolor que haya gente que no se defina”, señaló enojada ante un reducido grupo de intendentes, legisladores, sindicalistas y dirigentes de su confianza en una reunión en SMATA, este viernes por la mañana.