Sidersa, una destacada empresa en el sector de soluciones de acero, ha dado un paso significativo al inscribir su plan de inversión de 300 millones de dólares en el Régimen de Incentivo de Grandes Inversiones (RIGI). Este proyecto tiene como objetivo la construcción de una planta siderúrgica de última generación en San Nicolás, en la provincia de Buenos Aires.
“Esta presentación representa la primera iniciativa netamente industrial que se postula para el citado régimen y por su impacto económico, sus características tecnológicas únicas y la relevancia de las inversiones requeridas, se convierte en un proyecto estratégico para nuestro país”, señaló la empresa en un comunicado.
La iniciativa fue celebrada por el ministro de Economía, Luis Caputo, quien publicó un mensaje en la red social X: “Séptimo proyecto RIGI presentado. Sidersa por 300 millones de dólares.”
La planta proyectada por Sidersa no solo apuntará a cubrir la demanda interna de insumos como el hierro de construcción, con una capacidad de producción de 360.000 toneladas anuales, sino también fomentar las exportaciones. Este desarrollo es particularmente relevante ya que sería la primera siderurgia integrada construida en el país en más de 50 años, lo que representa un avance estratégico para la industria nacional.
El proyecto de Sidersa “representa la primera iniciativa netamente industrial que se postula para el RIGI y por su impacto económico, sus características tecnológicas únicas y la relevancia de las inversiones requeridas, se convierte en un proyecto estratégico para nuestro país”, señaló la empresa
Además de su impacto económico, el proyecto de Sidersa promete generar más de 300 empleos directos de calidad y aproximadamente 3.500 indirectos en sectores como la recolección de chatarra y la construcción. Durante la fase de construcción, se espera la creación de cerca de mil empleos adicionales. La planta incorporará “tecnología de vanguardia que no solo mejorará la productividad, sino que también reducirá las emisiones de dióxido de carbono a un tercio de las generadas por tecnologías convencionales, subrayando su compromiso con el medio ambiente”.
Por sus características, Sidersa asegura que su planta se perfila como única en América Latina, destacándose por “sus altos estándares de calidad y eficiencia, así como por su enfoque en la sostenibilidad ambiental mediante el reciclaje de chatarra y la integración de procesos productivos que ahorran energía. Este enfoque permitirá la sustitución de importaciones y fortalecerá la balanza comercial del país”.
La construcción de la planta siderúrgica también se presenta como una oportunidad para revitalizar el sector educativo en la región, colaborando con la comunidad local para reactivar carreras universitarias y terciarias relacionadas con la industria siderúrgica. Esto permitirá “capacitar a las nuevas generaciones con tecnologías avanzadas, preparándolas para los desafíos del futuro”.
Sidersa, con casi 70 años de trayectoria, es un actor clave en el mercado argentino de servicios siderometalúrgicos, abasteciendo a más de 2.000 clientes desde su complejo industrial en San Nicolás. Además, la empresa contribuye a la generación de energía solar a través de sus parques en Ullum, en la Provincia de San Juan, produciendo siete veces más energía eléctrica de la que consume, lo que ayuda a reducir el uso de combustibles fósiles y la huella de carbono del país.