Mientras el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, esta vez decide no dejarse llevar por la influencia de su gurú Donald Trump y seguir siendo escéptico ante el Coronavirus, las autoridades de salud brasileña registran el primer fallecido en el país a causa de la epidemia. En tanto Bolsonaro trata al público y a los medios de estar sufriendo una «histeria».
Este martes 17/03, el gobierno del Estado de San Pablo dio a conocer el primer hombre fallecido a causa del Coronavirus en Brasil. Se trata de un hombre e 62 años que era diabético y sufría una enfermedad cardíaca. Sin embargo, hasta el día de hoy se registraron 200 casos de COVID-19 en el país vecino y más de 180.000 infectados y 7.000 fallecidos a nivel mundial.
Según las cifras oficiales, San Pablo es la región con mayor cantidad de infectados, seguida por Río de Janeiro. Aunque en tanto, el presidente de extrema derecha, Jair Bolsonaro, continúa actuando con escepticismo. Así es que sus respectivos gobernadores, días atrás, decidieron suspender las clases, los eventos públicos el cierre de cines, teatros, monumentos, puntos turísticos y establecimientos comerciales.
«Ese virus ha traído cierta histeria; hay algunos gobernadores, en mi opinión, puedo estar equivocado, que están tomando medidas que van a perjudicar y mucho nuestra economía», aseguró el mandatario brasileño esta mañana en un programa radial antes que se de a conocer el primer caso fallecido. El mismo por supuesto se refirió al accionar de algunos estados del país frente a la crisis global, teniendo en cuenta que todavía no existe ningún tipo de plan a nivel nacional.
Al principio Bolsonaro parecía estar siguiendo la misma línea que su gurú político, económico e ideológico, Donald Trump, aunque en los últimos días el republicano norteamericano entro en pánico dando conferencias de prensa todos los días con nuevas medidas para contener el virus y salvar la economía del país. Bolsonaro también tendría que estar haciendo lo mismo, teniendo en cuenta que la situación económica del país latinoamericano no fue la mejor en los últimos meses.
En tanto, el mismo se preocupa por su próximo cumpleaños el 21/03 y la fiesta que organizará para la ocasión, a pesar de estar dentro del grupo de riesgo (a partir de los 60 años aproximadamente). «La vida continúa», aseguró Bolsonaro con respecto al hecho de que el Coronavirus ya se encuentra en todo el mundo. Al mismo tiempo, el presidente abraza a sus seguidores y viola la cuarentena. Recordemos que el mismo se sometió a la prueba de Coronavirus por haber estado junto a otros dos funcionarios días antes que habían testeado positivo.
Esta crisis por supuesto llega en un momento donde la figura del presidente está puesta bajo el reflector de la opinión pública y mismo de los poderes políticos, teniendo en cuenta que existe una gran grieta y enfrentamiento entre el Poder Ejecutivo y el Legislativo. Aunque lo único que logra el mandatario al llevar adelante este tipo de acciones desobedeciendo las propias recomendaciones del Ministerio de Salud Nacional, es confirmar que las acusaciones de los parlamentarios es cierta.
“Estamos viviendo la mayor crisis que Brasil vivió en los últimos cien años”, dijo Rodrigo Maia, el presidente de la Cámara de Diputados de Brasil y uno de los principales detractores de Bolsonaro actualmente. “Y tenemos un presidente que promueve manifestaciones contra otras instituciones”, concluyó el mismo al referirse a las marchas que organizó Bolsonaro contra el Congreso y el Poder Judicial.
Pero volviendo al Coronavirus y los casos registrados en Brasil, minutos después que se de a conocer el primer fallecido, el Centro de Contingencia de Coronavirus de San Pablo, anunció que estaban investigando si otras cuatro muertes que tuvieron lugar en la misma institución, también fueron causadas por el virus.
