Tras la rápida recuperación del precio internacional, que hoy supera los 40 dólares, y el deslizamiento cambiario, las petroleras plantearon al Gobierno la necesidad de aumentar el precio en surtidor. Las empresas saben que es complejo mover el precio en surtidor en medio de la crisis, pero creen que es necesario aumentarlos alrededor de un 7%, y en lo posible obtener la validación política antes de Octubre.
En precipitosa caída tras el estallido de la pandemia a principios de año, el Brent tocó su precio más bajo el 21 de Abril cuando llegó a cotizar a US$19,33. Unas semanas antes el Gobierno de Alberto Fernández había empezado a discutir el establecimiento de un precio sostén, que finalmente se oficializó formalmente un mes más tarde, el 19 de Mayo, fijando un precio de US$45 -según publica Urgente 24-.
Pero, si bien cuando el Decreto 488/20 se publicó en el ‘Boletín Oficial’, el Brent (la referencia del barril en Europa) aún valía menos que US$30, y la mayoría de los analistas internacionales proyectaba que el precio navegaría en esa banda por varios meses para orillar los US$40 recién hacia fines de 2020, ese proceso se aceleró contra la mayoría de los pronósticos.
El Brent cotiza desde hace una semana por arriba de los US$43. Y si bien aún es imposible asegurar que se establecerá en ese valor, la tendencia parece ser estable. Y una vez más, el dinamismo del escenario petrolero adelantó una agenda que el gobierno aspiraba a retomar recién durante el último trimestre del año.
Es que con el Brent cómodamente instalado arriba de los US$40 y el dólar oficial en $75, un 20% más que en enero, puertas adentro del Gobierno se empezó a plantear una eventual actualización del precio de los combustibles en Agosto o Septiembre.
De los insumos estratégicos que marcan el ritmo de la economía, las naftas y el gasoil fueron los únicos que no aumentaron en lo que va del año. La última suba se concretó a principios de diciembre de 2019 sobre el final del Gobierno de Mauricio Macri.
«El barril criollo sirvió para atajar el peor momento de la crisis del petróleo, cuando los precios cayeron por debajo de los 20 dólares. No esperábamos que el Brent rebote tan rápido, pero con estos precios internacionales el próximo paso es lograr un esquema en el que el petróleo cueste en la Argentina lo mismo que la paridad de exportación», explicó a ‘EconoJournal’ el presidente de una petrolera.
Es que con el Brent en torno a los US$43, las productoras de la cuenca Neuquina están cerrando exportaciones para agosto a un precio de entre US$39 y US$40 (Brent con un descuento de -4 dólares). En Abril se exportó crudo con un descuento superior a los US$10. «En mayo eran pocos los que creían que sería viable exportar crudo de Vaca Muerta casi a US$40. Hoy, a partir de la eliminación de las retenciones, podemos pensar en exportar a Brent menos US$3 o 4», reconocieron desde otra productora con activos en Neuquén al mencionado sitio.
Fuentes del sector de refinación calculan que para poder reconocer en el mercado interno un precio de US$40 para el crudo local, es necesario aumentar el precio del gasoil en surtidor al menos un 7%.
En esa clave, YPF le solicitó al Gobierno, con el respaldo del resto de la industria (Axion Energy, Raízen, Puma), elaborar un sendero que permita ir actualizando los precios de los combustibles durante lo que resta del año. La expectativa es lograr al menos validar políticamente un aumento antes de Octubre.
En tanto, aseguran que para YPF es una medida prioritaria para mejorar sus finanzas, pero también para asegurar el abastecimiento del mercado interno de combustibles (pese a la caída de la demanda local, esta semana fue necesario importar 60.000 m3 de gasoil para el parque eléctrico porque no hay más stock en las refinerías locales).
De todas maneras, cerca del Presidente Alberto Fernández afirman que no está definido aún qué hacer. Las empresas saben que es difícil para el Gobierno autorizar una suba en medio de esta crisis.
Tras la rápida recuperación del precio internacional, que hoy supera los 40 dólares, y el deslizamiento cambiario, las petroleras plantearon al gobierno la necesidad de aumentar el precio en surtidor. Las empresas saben que es complejo mover el precio en surtidor en medio de la crisis, pero creen que es necesario aumentarlos alrededor de un 7%, y en lo posible obtener la validación política antes de Octubre.