Hay dos imputados por el salvaje ataque a María y su hijo Santino, a quien mataron. La hermana de Omar Alvarado confirmó que casi mata a su sobrino e, insólitamente, el juez lo liberó. La familia regresa hoy a Salta. Ya les entregaron el cuerpo del niño. Emotiva despedida con velas en el hospital.
La Justicia continúa avanzando en la causa que tiene hasta el momento a dos personas detenidas por el brutal crimen de Puerto Deseado. El juez Oldemar Villa recibió otra confesión. La del adolescente de 16 años que ofició de “cómplice” de Omar Alvarado, principal sospechoso de matar a Santino y abusar sexualmente a María.
El joven (Javier M.) admitió haber estado en el lugar del hecho pero sostuvo no haber sido él quien mató al niño, ni tampoco abusar de la mujer. También manifestó que fue amenazado por Alvarado (33) para que lo ayudara. Asimismo, aportó datos que permitieron hallar el teléfono celular que le habían robado a la víctima. Fue trasladado a Río Gallegos en donde será alojado en el Centro Juvenil Socioeducativo.El teléfono celular fue encontrado en el marco de un rastrillaje efectuado por la Policía. Será sometido a peritajes. Estaba a unos dos kilómetros de donde fue abusada María.
El juez ordenó realizar una junta psiquiátrica para que los especialistas determinen si los dos acusados por el crimen y la violación de la mamá pueden ser juzgados o son inimputables. Recordemos que había manifestado que Alvarado es consciente de sus actos. Ahora, trascendió que el menor tiene “rasgos de esquizofrenia”.
Alvarado continúa alojado en una comisaría de Caleta Olivia. Ayer estaba prevista su declaración indagatoria pero esta finalmente se pospuso.
“Quiero que pague por lo que hizo”
La hermana de Omar Alvarado, Rosa, habló acerca de cómo enfrenta su vida luego de lo que hizo su pariente. Además, confirmó lo anticipado por La Opinión Austral (fuente de esta noticia) acerca de la tentativa de homicidio de este en detrimento del su hijo.
“Lo reconocí el mismo día que hicieron el identikit“, dijo Rosa en su desgarrador testimonio a Radio FM Desire de Puerto Deseado. Ella estaba de vacaciones en Santa Fe cuando se enteró de lo sucedido: “Vine de viaje llorando”.
Indicó que entregó al imputado porque quiere que la gente “sepa que yo hice lo correcto, si yo me quedaba callada esto quedaba impune como muchos casos en Puerto Deseado“, sostuvo.
Acerca de la enfermedad que padece su hermano (esquizofrenia), aclaró que tampoco justifica su sangriento accionar: “No quiero decir que él no tiene la culpa, quiero que pague lo que hizo”.
De esto se desprende también el caso publicado este lunes por La Opinión Austral, sobre el previo ataque de Alvarado sobre uno de sus sobrinos, el hijo de Rosa: “Mi hijo llegó ensangrentado a la casa”, agregó y contó además que fue él quien “se acercó al Juzgado y casi lo linchan“.
En su testimonio no pudo evitar quebrarse por el dolor que atraviesa tanto María como toda su familia, que vino desde Salta para acompañar a la mujer que sigue internada en el Hospital distrital.
“Daría mi vida por la vida de ese nene, se llama igual que mi sobrino“, dijo Rosa acerca del pequeño Santino, de 4 años, asesinado por los malvivientes.
Además, expresó que cuando pudo ver a los familiares desde lejos “les quería pedir perdón, los quería abrazar, les daría mi vida a ellos”.
Por otra parte apuntó a que “en Deseado hay muchos violadores y sus familiares los tapan“, y que ahora “no quiero salir de mi casa, no quiero dejar solos a mis hijos”.
El que habló también fue el padre del adolescente de 16 años. Julio, manifestó:
“Yo estaba en la mina trabajando, cuando me enteré pedí para bajar”, indicó el hombre, que relató además los ataques que sufre su familia desde que trascendió la noticia que implicaría al adolescente. “Quiero que nos dejen de amenazar a mi hijo, a mi señora, a mi nieto“, dijo en diálogo con FM Dimensión.
“No soy una mala persona”, expresó, y enfatizó en que quiso “dar la cara” porque quiere “vivir tranquilo”: “Trabajo y soy honesto, no quiero vivir por la cabeza gacha por lo que hizo, si así fue”, indicó.
Relato que él y Omar eran “amigos” pero que siempre que lo veía al hombre de 33 años en su casa lo echaba. No le gustaba “esa junta” de su hijo. También admitió que el menor se vio involucrado en hechos delictivos y que consumía drogas, pero que con el nacimiento de su primer hijo hace un mes, “había cambiado”.
El caso esta esclarecido y ahora el juez deberá definir la situación de los imputados por el homicidio, tentativa de femicidio y abuso sexual agravado.
El ministro de Seguridad Lisandro De La Torre manifestó que el caso “está esclarecido a nivel policial” y dijo que los dos sospechosos ya fueron puestos a disposición de la Justicia”.
“La gobernadora Alicia Kirchner pidió a todo el gabinete que se ponga a disposición del caso para que se logre un rápido esclarecimiento, y eso es lo que hicimos desde un primer momento”, explicó el funcionario.
Según De la Torre, apenas fueron informados del hecho “se dispuso que las máximas autoridades de la policía provincial se trasladaran al lugar para iniciar la investigación y se ordenó un refuerzo del personal policial en la zona para llevar a cabo un operativo cerrojo y evitar que los sospechosos pudieran escapar”.
Destacó la labor de la Policía y en especial el trabajo “muy profesional de los integrantes de la Policía Científica que elaboraron el identikit” mediante el cual se logró identificar a los dos involucrados.
En horas de la tarde, el juez Oldemar Villa fue nuevamente repudiado por decenas de personas que piden que renuncie. Al grito de “que se vaya el juez”, le reclamaron en la puerta del juzgado por causas que quedaron impunes, y para que el crimen de Santino y la violación a María no corra la misma suerte.
Todo Deseado fue a despedirla
Cientos de vecinos y vecinas fueron al hospital distrital deseadense para despedir a María. Hubo una marcha de velas y la propia mujer junto a su familia salió a agradecer a todos por el apoyo. “Deseado le pide perdón” dijo una vecina que tomó la voz en representación de toda la comunidad, que muy educadamente mantuvo silencio a pedido de las autoridades, y fue a mostrar, una vez más, su apoyo a la víctima de este crimen.
Hoy, la familia regresara a Rosario de la Frontera. Será en un viaje de avión con apoyo del Estado. Lo harán junto al féretro de su pequeño hijo Santino. Las autoridades entregaron el cuerpo en horas de la tarde una vez que concluyeron todas las pericias.
