Pese a que en los últimos cuatro días había habido una tendencia a la baja en el curva de los contagios , hoy el número volvió a dispararse trágicamente en Italia, al registrarse en 24 horas 4492 casos (1000 casos más con respecto a la víspera , cuando hubo 3491), algo que aumentó la alarma y elevó el total de casos a 80.538, una cifra espantosa, que casi alcanza al total que China dijo haber tenido. Según datos de la Protección Civil, en 24 horas se contabilizaron, además, 662 nuevos decesos , un número levemente inferior al de la víspera, cuando el balance fue de 683 víctimas fatales, algo que hizo crecer el total de fallecidos a 8165.
El único dato positivo fue que casi hubo 1000 personas curadas , para ser precisos, 999, cifra que hizo subir el número total de recuperados desde el inicio de esta emergencia a 10.361, agrega LA NACIÓN.
«No podemos esperar una disminución de casos, no es una epidemia que se resuelve en 48 horas, debemos esperar los efectos de las medidas de distancia social y estamos analizando este incremento con respecto a la tendencia de los últimos días», dijo Agostino Miozzo , coordinador del comité científico-técnico de la Protección Civil para enfrentar la emergencia del nuevo coronavirus, en la conferencia de prensa cotidiana. «Quizás hubo una acumulación de resultados de tests que fueron emitidos hoy , pero es una hipótesis. Tenemos que tener paciencia, necesaria para este tipo de epidemias que no tienen soluciones mágicas», agregó.
Por segundo día consecutivo en la conferencia de prensa en el que se informan los nuevos datos de la pandemia, parecida a un boletín de guerra y seguida por TV por los 60 millones de italianos enclaustrados en sus casas, no estuvo presente el jefe de la Protección Civil, Angelo Borrelli. Borrelli ayer tuvo algunas líneas de fiebre por lo que se recluyó en su casa, aunque la buena noticia fue que resultó negativo al test diagnóstico de Covid-19 que le fue realizado.
La mayoría de los nuevos casos de hoy se registraron en la región de Lombardía , la más golpeada, en el norte, tal como había adelantado su gobernador, Attilio Fontana , que informó de un incremento de casi 2500 casos -de los cuales más de 800 en Milán- y que no ocultó su preocupación por la evolución de la pandemia.
«Los datos marcan un crecimiento significativo», admitió el asesor de Salud de Lombardía, Giulio Gallera, que sin embargo destacó que también creció el número de personas que lograron recuperarse y ser dados de alta. «Hay muchas más personas curadas que vuelven a su casa», destacó.
En medio de un clima de gran preocupación, mientras en una audición ante el Parlamento la ministra de Educación, Lucia Azzolina, dijo desconocer cuándo podrán reanudarse las clases en escuelas y universidades, el gobernador del Veneto, Luca Zaia, llamó a suspender las normas sobre la privacidad para rastrear los movimientos de las personas, como se hizo en Corea del Sur para contener el contagio del Covid-19. El Véneto es la tercer región más afectada, después de Lombardía, primera en el ránking y Emilia Romagna, segunda.
«Estoy convencido de que en este momento deberíamos suspender las normas sobre la privacidad y dejar a los sistemas sanitarios un poco más de libertad» , dijo Zaia a la prensa, aludiendo al hecho de que la Sanidad es una competencia que cada región tiene en sus manos. «Sobre la rastreabilidad tenemos disponibilidad también de parte de Israel para verificar los traslados con sistemas inteligentes. Lo mejor es apuntar al sentido cívico», agregó.