“Comodoro es una ciudad compleja por la tipografía que tenemos. Trasladarse de zona norte a sur en horarios pico, puede demandar mucho tiempo”, sostuvo Sergio Bohe, quien dijo que la gestión del Ejecutivo local apunta a tener un servicio de transporte público eficiente, a un valor razonable.
“Tenemos que transitar estos momentos acompañándonos. Son épocas difíciles en donde hay que poner el lomo. Comodoro es una ciudad que estuvo sola mucho tiempo y ahora nos hacemos cargo ante la ausencia de Nación”, enfatizó el funcionario local.
Lo hizo al exponer información compleja y detallada sobre las prórrogas de contratos de transporte, los subsidios y la situación económica imperante, en un diálogo al aire con Radiocracia en el que abordó un tema con muchas variables y que requiere un análisis profundo para comprender completamente las implicaciones.
“Son dos contratos distintos, entonces se toma por precaución, soy una persona muy precavida, por precaución se pone un plazo razonable, de un año, un año y medio, y después tenés, como es una prórroga lisa y llana del contrato madre o el contrato de la oportuna licitación que hubo, te da la posibilidad de rescindirlo, en ese caso cuando tengas una licitación en marcha. O, como son dos licitaciones, dos contratos distintos, una podrá tener un tiempo y otra podrá tener otro tiempo, digamos. no necesariamente deben concurrir en el tiempo”, analizó Bohe.
Y agregó en ese sentido que la prórroga que se dio es la 21ª, pero desde el 11 de diciembre a esta parte, es la única que nos tocó gestionar. Básicamente este año lo que hemos estado pensando, y más que pensando, sufriendo, ha sido el sucesivo descalabro económico nacional con la caída de la ley del fondo compensador del transporte, que acercaba alrededor de unos 100 millones de pesos del Estado Nacional y unos 20 millones de pesos del Estado Provincial”.
“Eso constituía, más los 500 o 600 millones que aportaba la municipalidad, un subsidio importante. Ahora ese subsidio está en alrededor de 1.500 millones de pesos. El Estado Nacional prácticamente no aporta ese fondo compensador, lo desconoció por decreto, y el Estado provincial, si es concurrente, está aportando alrededor de unos 180 o 200 millones de pesos mensuales, que constituyen alrededor del 15% o el 17%, depende del mes, del subsidio que ha decidido la ciudad sobre un costo promedio de alrededor de 2.200, 2.100 pesos por pasajero transportado, más una serie de subsidios cruzados que la ciudad ha decidido y ha sostenido en el presente año”, explicó.
Sobre si ese esquema se podrá redefinir el año próximo o si habrá que ver un nuevo contrato, mencionó que no sabe cómo trabajarían pero que “sí se está definiendo básicamente la prestación que aporte a la movilidad social, simplificar un poco el tema de los recorridos tratar de sostener en estos tiempos en Argentina el concepto de servicio público, de transporte, ya es todo un desafío. Ese desafío es doble para una ciudad como Comodoro Rivadavia, porque es muy extensa, con recorridos de hasta 60 kilómetros por vuelta, con un comodoro que se extiende aprisionado por el mar y por los cerros y por una topografía que es bastante compleja”.
“Todas esas complejidades hacen que el transporte, la movilidad sea cara y haya que pensar en un régimen sostenido de subsidio para, en realidad, como sucede en todo el mundo, que se subsidie el transporte en Europa, en Estados Unidos, en China y en los países de Asia, se subsidie el transporte público para mejorar la movilidad social”, determinó.
De la idea de una licitación por ramales o abrir una licitación en general por todo el servicio que actualmente tiene la prestataria Patagonia Argentina, mencionó que “tenemos que pensar en la gente en tratar de que les llegue un servicio eficiente a un valor razonable. Esto es lo que tiene que conjugar el servicio público de transporte, las distintas modelizaciones que se han venido trabajando el año pasado, que se trabajaron muy bien y en eso tenemos continuidad con todo el equipo que tiene 30 años y más de 30 años algunos en el área de transporte. Nos basamos en ese conocimiento, concurrimos con conocimiento de otras ciudades hermanas y amigas”.
Consultado en cuanto a cuál es el riesgo de la empresa si todo es subsidio, negó que sea tan así: “tenés un 50% aproximadamente de subsidio, un poquito más, el riesgo de la empresa siempre está presente porque está el de tránsito, incidentes o accidentes, tiene riesgos porque tiene que pagar los sueldos y esperar luego los subsidios que son a posterior y no se pagan por adelantado”, sostuvo.
La idea es tener bastante avanzado todo hacia fines de año y tener pasado en limpio, ver cómo sedimentó, fue muy importante ver cómo se iban sedimentando los costos, la inflación, y tratar de llegar a un amesetamiento al que se ha llegado vía agotamiento de la economía popular, del bolsillo de la gente, o sea, un estancamiento, una falta, una escasez de consumo, y todo esto hay que ir mesurándolo en función de un servicio público”, concluyó Bohe.