Liliana Maimo, vicepresidenta de la Cámara Inmobiliaria de Comodoro, abordó la situación de los alquileres en la ciudad. Entrevistada por Diario Crónica, planteó que cuando comenzó el aislamiento preventivo, social y obligatorio, los pagos se mantuvieron dentro de todo al día, pero luego de transcurrido de un mes, muchos inquilinos comenzaron a tener problemas para pagar los alquileres.
Además, puso el foco en la incertidumbre económica que existe en Argentina al afirmar que “una vez que se solucione todo esto, va a ser complicado alquilar locales, no sabemos quién va a querer montar un negocio en este contexto”.
En el mes de abril, desde la Cámara Inmobiliaria se realizó un relevamiento de pago de alquileres y viviendas. En términos generales, fue un mes normal, con un buen flujo de pagos. “Fue un mes normal porque casi todos recibieron el ciento por ciento de sus salarios. De todos modos, los locales ya habían empezado a tener problemas por la suspensión de actividades a partir del 20 de marzo, y para el 10 de abril, por la imposibilidad de poder trabajar, ya registraban inconvenientes para pagar.
Hubo muy buenas negociaciones con los propietarios de los locales en el mes de abril, y con más razón en mayo. Cuando volvimos a hacer el relevamiento, vimos que el pago de alquileres de viviendas estaba resentido. Se registraron atrasos, pagos en cuotas y muchos manifestaron que les habían reducido el sueldo o que no les habían pagado en tiempo y forma”, indicó la titular de la Cámara Inmobiliaria. Te puede interesar Comodoro Billar Club volvió a las prácticas
Incertidumbre
En este sentido, señaló que, más allá de los agentes provinciales, que no cobran sus salarios en tiempo y forma desde hace varios meses, se registraron problemas con empleados del sector petrolero y de comercio que normalmente pagaban en tiempo y forma.
Con este panorama en curso, la morosidad aumentó considerablemente, lo que plantea un manto de incertidumbre total para el rubro. “En el caso de los locales, esto depende mucho de la actividad que se está desarrollando. Si bien ahora está trabajando el ochenta por ciento de las actividades, los resultados de ventas no son los esperados, están en un veinticinco, treinta por ciento de lo que vendían habitualmente, negociando constantemente, pero con muy buena predisposición de los propietarios”.
