Desde la Subsecretaría de Fiscalización a través de la Dirección de Bromatología, se clausuró el supermercado Jumbo, debido a distintas anomalías en el local comercial. En el lugar, se constató la presencia de roedores vivos y muertos, excremento de los mismos, productos vencidos para la venta, y falta de higiene general.
Este martes, desde el Municipio a través del área de Fiscalización se concretó la clausura en horas del mediodía, debido a las distintas falencias detectadas en el local comercial.
Al respecto, el titular de Fiscalización, Daniel Campillay, afirmó que “en horas del mediodía se concretó el procedimiento de rutina, en el Supermercado Jumbo ubicado en Av. Yrigoyen, con personal de Bromatología que tras detectar muchas falencias, determinó la clausura del lugar”.
En este sentido, indicó que en el local se constató “la presencia de roedores vivos y muertos, excremento de los mismos, como así también productos vencidos expuestos a la venta”.
“Además –agregó- se pudo observar falta de higiene general. En la sala de elaboración de panadería había agua servida estancada en pisos, moho en máquinas; como así también en la sala de rotisería donde se verificó la presencia de grasa en paredes y una campana, tachos de residuos con basura sin la correspondiente tapa, entre otras anomalías”, explicó.
Por último, el subsecretario sostuvo que “el procedimiento se concretó con personal municipal y quedó todo a disposición del juez de Faltas n°1, quien determinará los pasos futuros”.
