«Me llamó la atención que se tomaron el tiempo de abrir sobres, carpetas y biblioratos», describió.
Mario Cimadevilla dijo que no descarta que el robo sea un mensaje por su rol en esa causa o por las previas denuncias que hizo contra el gobierno del Chubut. Le llamó la atención que los ladrones estuvieron más ocupados en buscar papeles de trabajo que objetos de valor o dinero.
«La señora que trabaja en casa nos contó que la ataron y la encapucharon, las primeras preguntas no eran sobre dónde estaban las cosas de valor sino que le decían ‘dónde tiene la documentación de trabajo tu jefe’. Y fueron derecho a la computadora, la rompieron y se llevaron el disco rígido», dijo el ex senador nacional y ex titular de la Unidad de Investigación AMIA, en diálogo con Radiocracia.
«Uno de mis hijos tiene un negocio y en su dormitorio tenía la plata de la recaudación, que eso se lo llevaron. También había unas armas que eran recuerdos de mi abuelo, eso de lo llevaron. Pero todas las preguntas estaban orientadas a dónde estaban los papeles. Me llamó la atención que se tomaron el tiempo de abrir sobres, carpetas y biblioratos», describió.
«Puede estar ligado al trabajo en la unidad AMIA o a las cosas que uno viene denunciando en la provincia del Chubut. Yo no descarto absolutamente nada», manifestó en la entrevista radial. Y luego aclaró que si bien tuvo contacto con referentes locales de la Policía Federal, «del gobierno nacional no me llamó absolutamente nadie».
Luego, el referente de la UCR en Chubut aclaró cómo llegó su dezplazamiento de la unidad que investiga el caso de la AMIA y señaló las actuaciones de Germán Garavano, el actual ministro de Justicia del gobierno de Mauricio Macri. «Después del atentado, hay un juez que investiga que es (Juan José) Galeano. En el transcurso de esa investigación, hay sobornos a testigos para que declaren falsamente y se ocultan pruebas. Galeano es apartado de la causa y se inicia la causa por el encubrimiento del atentado, donde nosotros estábamos como querellantes».
«Entendíamos que había mérito para acusar a todos los investigados: Galeano, sus secretarios, los fiscales, Menem, Anzorreguy -que había sido jefe de la SIDE-, ‘Fino’ Palacios. Cuando el ministro Garavano se entera que nosotros ibamos a sostener la acusación en la querella, ordena revocar el poder a los abogados y designa a un abogado vinculado a Angelici, que es un gran operador judicial», detalló Cimadevilla.
«El ministro Garavano ha sido denunciado penalmente por esta actitud y el país ha sido denunciado ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos por incumplimiento de tratados. Esta última denuncia fue acompañada por Lilita Carrió, quien también denunció por encubrimiento al ministro», manifestó. «Y luego de todos estos hechos, un decreto disolvió la unidad y las querellas así dependen directamente del ministro Garavano. A mi no me queda ninguna duda de que el ministro hizo todo esto por amiguismo».